Una riña se registró en las instalaciones de la Cámara Nacional del Comercio, Servicios y Turismo (Canaco), entre un grupo comandado por Silvestre Fuentes Flores, quien dice ser el presidente de ese organismo, y Juanita Montero, a quien Silvestre Flores despojó de las instalaciones con lujo de violencia.
Cerca de las 21:30 horas de ayer, un grupo de aproximadamente 10 personas, a la cabeza Silvestre Fuentes Flores, arribó a las instalaciones de la Canaco Servytur, donde utilizando la violencia despojaron del inmueble a Juanita Montero, quien actualmente dirige la cámara.
Silvestre Fuentes, de igual forma dice ser el presidente legítimo del organismo, por lo que con poder de sus agremiados tomó posesión de las instalaciones.
Cabe señalar que testigos de los hechos informaron que el grupo que tomó las instalaciones era comandado por militantes priístas a cargo de Miriam Fuentes Flores, mismos que se reunieron el domingo con el espurio presidente municipal Oscar Rosas y Silvestre Fuentes.
Transeúntes y testigos rápidamente dieron parte al número de emergencias 911, para pedir el apoyo de alguna unidad al ver cómo se encontraban peleando y agrediéndose los unos a los otros.
La primera unidad en llegar fue la unidad PM053, quienes tomaron datos de los hechos y al ver la tensa situación, optaron por pedir refuerzos.
Minutos más tarde, seis unidades más de la Policía Municipal se hicieron presentes en el sitio de los hechos; sin embargo, la situación ya se había tranquilizado, el grupo de Fuentes Flores ya había tomado la Canaco, y con papeles tapizaron las ventanas para evitar que se observara quiénes estaban en el interior.
Mientras que Juanita Montero, en compañía de Karen Montero, se retiraron del sitio al no tener protección de las autoridades y estar en peligro su integridad.
Es necesario señalar que se vivieron momentos de tensión en el lugar, luego de que un hombre arrojara un cuchillo por debajo del protector de un puesto colindante a la Cámara, el cual se cree sería utilizado para la agresión; sin embargo, los agentes del orden dejaron ir al sujeto, al no poder comprobar nada.
(Texto y fotos: Ricardo Jiménez)