En cumplimiento de un ordenamiento federal, la Juez Primero de Control del Centro de Justicia Oral de Mérida, Licenciada Suemy del Rosario Lizama Sánchez, reclasificó el delito de homicidio calificado al de homicidio cometido en riña con el carácter se provocado que se le instruye a Andrés Gerardo Itzá Tun, con lo cual la pena a enfrentar reduce en forma considerable.
Ayer por la mañana se llevó al cabo la audiencia en la que se dio cumplimiento a la ejecutoria federal, en la cual se reclasificó el delito por el cual el imputado enfrentaba una sanción de hasta 40 años de prisión y ahora enfrenta una sanción penal de 2 a 6 años de cárcel.
En su momento, como probable responsable de la muerte de Jasiel Clemente Urías Yeh Dzul, fue vinculado a proceso penal Andrés Gerardo Itzá Tun, al resolverse sobre su situación jurídica en el Juzgado Primero de Control, a cargo de la Licenciada Suemy del Rosario Lizama Sánchez.
Lo anterior, dentro de la causa penal 224/2018/J1, donde se ratificó la detención del ahora imputado y se le mantuvo la medida cautelar de prisión preventiva por todo el tiempo que dure el proceso.
Al resolver la Juez de Control sobre la situación jurídica del acusado de homicidio calificado, encontró elementos necesarios para declararlo formalmente preso por la muerte de Yeh Dzul.
Sin embargo, a través de su defensa promovió un amparo en el que se ordenó que se reclasificara el delito imputado por el de homicidio cometido en riña y con el carácter de provocado.
Los hechos, como dimos a conocer en forma oportuna, se registraron en un predio de la colonia Roble Agrícola, el pasado 21 de octubre del 2018.
Según obra en la carpeta de investigación, el acusado se encontraba en el predio donde habitaba el extinto con su pareja sentimental Valeria de Jesús, aprovechando que estaba dormido en una hamaca ingresó con la mujer y a un lado de donde se encontraba el difunto se acariciaban y besaban semidesnudos.
Sin embargo, en un momento dado, al despertar Jasiel Clemente y percatarse de que a un lado de su hamaca estaban los infieles, ofendido en su honor, le reclamó al individuo y le lanzó un golpe, pero no contaba con que estuviera armado y en respuesta sacara de entre sus ropas una navaja.
De tal manera que al lanzarle el tajo con el arma blanca se la clavó a la altura del pecho, ocasionando que cayera al piso mortalmente herido.
La causa de la muerte fue por anemia aguda pos-hemorrágica, secundaria a perforación de víscera cardiaca por herida de arma blanca.
(Armando Gamboa Romero)