CAMPECHE, Cam., 8 de julio.- En las primeras horas de ayer se registró el suicidio número 47 en el barrio de Santa Ana de la ciudad capital, donde el joven Pablo Pérez, de 22 años, decidió acabar con su existencia con un disparo en la cabeza.
Debido a que el joven vivía en un cuarto trasero, sus familiares no escucharon la detonación, pero aseguraron que se encontraba bajo tratamiento médico por crisis de ansiedad.
El cuerpo fue descubierto por uno de sus parientes alrededor de las 9:00 horas, cuando fue a verlo a su cuarto, y quedó sorprendido ante el macabro e inesperado hallazgo.
Al descubrir el cuerpo, dieron parte al 911 solicitando una ambulancia. En respuesta llegó personal del CRUM, que ya no pudo hacer nada debido a que el joven se encontraba sin vida desde hacía varias horas, por lo que fue notificado al C-5.
Al lugar arribaron elementos de la Policía Estatal Preventiva, los cuales acordonaron el área, mientras esperaban al personal del Servicio Médico Forense para el levantamiento del cuerpo y realizar las investigaciones correspondientes.
La presencia de las unidades policíacas y de la ambulancia llamó la atención de vecinos de calles aledañas, quienes al enterarse del suceso presenciaron el momento en que era sacado el cuerpo en una bolsa negra y subido al vehículo del Semefo.
Mientras que elementos de la Fiscalía General del Estado invitaron a los familiares a trasladarse a esa dependencia para proceder a la entrega del cuerpo, para su velación y más tarde su cristiana sepultura.
(Héctor Zavala)