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Campeche

Difícil vida del verdadero artesano

SANTA CRUZ EX HACIENDA, Calkiní, Cam., 18 de octubre.- La falta de apoyos con equipos para trabajar y realizar diversas artesanías de madera llevaron a un hombre artesano de más de 80 años a construir su propia herramienta para poder elaborar sus productos y posteriormente comercializarlos.

Pedro Sulub Ortega, quien cuenta con más de 80 años de edad, desde que tenía 9 años, junto con su abuelito se dedicó a realizar estas labores y podía hacer los trompos, baleros, batidores, yoyos, molcajetes y otras artesanías.

Mencionó que vivía Dzityá, Yucatán, pero nació en Dzununcán y en Santa Cruz Ex Hacienda lleva viviendo 66 años, por lo que desde que llegó a este poblado se dedicó a realizar esta labor artesanal que le ha servido para poder obtener un recurso económico para mantenerse junto con su pareja.

A la fecha no ha recibido ningún tipo de apoyo de parte del gobierno y muchos han llegado solo a tomar fotografías de la labor que hace e incluso le han llevado a firmar documentos que a la fecha no le han dado beneficio alguno y sus obras artesanales que realiza son vendidos de manera local, ya que así como no cuenta con el apoyo del gobierno, otras personas llegan a adquirir el producto a un bajo costo.

Le han ofrecido un torno por parte de la autoridad, ya que una señora llegó de Calkiní y dijo que al menos en seis meses podría tener este apoyo, pero lamentablemente el torno nunca llegó después de haber realizado varios papeleos y firmado documentos con la emoción de que por fin sería apoyado para poder realizar la labor más rápido y hacer menos esfuerzo.

Estos apoyos prometidos nunca han llegado, por lo que podría ser que algunas personas pudieran estarse aprovechando de estas humildes personas que realizan artesanías de calidad.

Es por eso que a través de este medio señaló que ojalá y las autoridades tomen en cuenta esta publicación y lo apoyen ya que ahora se le hace más complicado poder realizar esta labor, ya que sufrió una desgracia al caerse y fracturarse una pierna y perder la vista al estallar una botella de ácido muriático en la cara.

Sin embargo, con el uso de su propia inteligencia pudo crear su propia herramienta a base de maderas y una soga de nylon que ahora es lo que está usando para poder continuar la labor, ya que indicó: “sino me esfuerzo, aunque me duele la pierna, casi no veo y estoy viejo, nadie me va a mantener”.

Los productos que realiza varían en sus costos, ya que hay algunos pueden valer desde 40 pesos hasta 200 pesos, según el artículo, ya que depende del tamaño y decorado.

Para poder hacer una batidora o una azucarera se tiene que laborar todo un día completo, muchas veces inicia la labor desde la una de la mañana para empezar a tallar la madera que utiliza, siendo dos tipos, el huiro y el guayacán, misma que tiene que ser comprada, ya que por sus condiciones ahora no puede ir a cortarla de manera personal.

La madera es de Pich, lugar donde tiene que ser encargada, ya que el guayacán es una madera que al ser tallada queda muy preciosa y puede ser decorada en la elaboración de los diferentes artículos.

Se pudo tener acceso a unos documentos sobre este caso de don Pedro Sulub Ortega y se pudo comprobar que el año pasado y con fecha del 12 de septiembre del año 2016, se realizó una solicitud para poder construir una casa de artesanías de molcajetes y batidoras de madera que acostumbra a realizar desde los 10 años de edad.

En su escrito especificó que requiere de una casa donde pueda exhibir su trabajo de calidad que elabora, ya que actualmente no cuenta con un espacio digno para poder realizarla y que de esta manera la gente que llega al lugar pueda comprar.

“La verdad soy un humilde artesano de bajos recursos económicos y vivo al día con el trabajo que realizo y por tal motivo no cuento con el recurso económico para construir una choza y de esta manera vender más productos”.

Este documento le fue otorgado el visto bueno por parte de Rufino Tec, para poder ser entregado a las autoridades municipales, por lo que el documento fue recibido en la Presidencia Municipal por parte de la secretaria el día 13 de septiembre del 2016 a las 12:30 horas.

Sin embargo, hasta la fecha no se ha tenido una respuesta favorable, teniendo en cuenta que muchos han sido beneficiados por acciones que sólo han sido dejados atrás y a quienes verdaderamente intentan y requieren del apoyo para poder tener una superación simplemente no lo reciben.

La vida del verdadero artesano es muy difícil, mucho más cuando se niega o se tiene el olvido de parte de las autoridades, por lo que es lamentable ver cómo las manos trabajadoras son las que muchas veces menos tienen la oportunidad de un apoyo para la superación.

Cabe señalar que en el mercado de Calkiní se vende productos de madera que son adquiridos en la vivienda de este artesano que se caracteriza por realizar los tradicionales molcajetes o molinillos para chocolate que son utilizados en estas fechas que se aproximan para los fieles difuntos.

(Jorge Aké Gutiérrez)

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