Los productos a base de cacao, ya sea para uso comestible o personal, es un mercado poco explotado en la Isla, por lo que el emprendimiento en este sector sirve para cubrir esta necesidad, explicó Salvador Luna, emprendedor, quien realiza productos artesanalmente a base de chocolate.
“Nuestro emprendimiento está constituido en dos partes, la primera es que de Comalcalco recibimos productos 100 por ciento orgánico, como chocolates amargos, dulces, sin azúcar, así como cacao simple para triturarlo y elaborar bebidas, entre otros productos como la cocoa y la crema”, informó.
Asimismo se dedican a la confitería de chocolate, elaborando figuras de chocolate, trufas, dulces, barras de cereal, entre otros; decidieron abrir su negocio “Sabores Caseros” para ofrecer una amplia gama de productos.
“Nos manejamos a través de las redes sociales, donde recibimos los encargos y hacemos las entregas, y podemos decir que el mercado de chocolate en Carmen sigue virgen, porque son pocos los que se dedican a esto, y muchos los que gustan del chocolate, especialmente que lo elaboramos artesanalmente”, apuntó.
Dijo que ya llevan su primer año en el negocio y han tenido ventas regulares, pero siguen buscando posicionarse en el mercado y han recibido buena aceptación de los ciudadanos, pues les gustan este tipo de productos.
“Quizá nos hemos topado con quienes dicen que les resultan muy amargos algunos productos, pero para ello hay variedad, y recibimos buena crítica, y se pueden regalar, cocinar o aplicar los productos a base del cacao”.
Salvador Luna y su esposa Hortensia Ramírez realizan para esta temporada galletas con motivos navideños, pero igual los hacen durante el 14 de febrero, donde hacen otro tipo de diseños relacionados con la festividad.
“Tenemos una diversidad en nuestros productos, aunque llevamos un años, seguiremos en este negocio hasta seguir expandiéndolo, y esperamos que nos vaya mejor este año que empieza, asimismo, invitamos a los ciudadanos a probar nuestros productos, que son artesanales y de calidad”, concluyó.
(Texto: Dayana Alcalá /
Fotos: Carlos Valdemar)