CAMPECHE, Cam., 13 de enero.- El subdirector de Vida Silvestre de la Dirección de Patrimonio Ambiental de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales del Estado de Campeche (Semarnatcam), Jorge Berzunza Chío, informó que al cierre de la temporada de anidación de tortugas 2018 se registró un incremento en la recuperación de la población de los quelonios de hasta un 105 por ciento.
En entrevista, Berzunza Chío indicó que a pesar de permanecer en la categoría de especies en peligro crítico de extinción, al cierre de la temporada se contabilizaron en todos los campamentos tortugueros del Estado un total de 4 mil 400 nidos de la especie tortuga Carey (Eretmochelys Imbricata).
El biólogo de la Semarnatcam, señaló que durante la temporada fueron liberadas más de 100 mil crías de la tortuga Carey, tortuga Blanca (Dermatemys mawii) y la tortuga Verde (Chelonia mydas), las cuales año con año acuden anidar a las playas campechanas.
Indicó que aproximadamente el 80 por ciento de las costas de Campeche son sitios de arribazón de tortuga marina y las más importantes se encuentran en el sur del Estado, específicamente en Carmen, Sabancuy e Isla Aguada, así como Punta Xen, tanto de tortugas de especie Blanca y Carey, respectivamente.
Berzunza Chío agregó que a pesar del enorme esfuerzo de conservación, la erosión marina es un problema significativo que sigue afectando la reproducción de las tortugas, ya que este fenómeno provoca que se cambien los sitios históricos de anidación y que las tortugas se tengan que desplazar a otras playas.
Explicó que dicho proceso se presenta a raíz del cambio climático y que actualmente se han perdido entre 2 y 3 kilómetros de playa por año, sin embargo dijo que esto se compensa, ya que hay otras áreas en el Estado donde hay agregación de arena y se van formando.
Cabe mencionar que en el Estado perduran 12 campamentos tortugueros, que operan cada año, sin embargo los recursos que reciben por parte de la administración estatal son insuficientes para llevar a cabo acciones de mayor eficiencia para la conservación. Los campamentos se mantienen gracias al enorme esfuerzo de personas voluntarias y conservacionistas que apenas sacan para sus gastos.
Los recursos anuales que destina la Semarnatcam para proteger y preservar a las especies marinas apenas representan un apoyo para los biólogos y con trabajo alcanza para el combustible y motonetas, pues la mayoría del presupuesto es destinado para la gente que se queda realizando el trabajo desde las oficinas, que en mayor medida ni siquiera es personal indispensable.