Vecinos del fraccionamiento Villas de San José llevan 13 años viviendo entre olores fétidos y aguas residuales, al rebosarse los drenajes y alcantarillas de los registros, lo que les ha causado problemas de salud. De acuerdo a la ciudadana Maritza López González, ya no pueden ni comer a gusto, pese a que administración tras administración les prometen una solución. Asimismo piden al Alcalde Oscar Rosas González que regrese a cumplir su promesa de campaña, de solucionarles el problema.
Lamentablemente la corrupción permitió que estas viviendas fueran construidas por la empresa Su Casa en la administración panista de Jorge Rosiñol Abreu, dando el permiso de construcción sin revisar que se cumplieran todos los requerimientos por parte de Desarrollo Urbano, lo que originó que se hiciera un fraccionamiento y una planta tratadora de aguas negras de pésima calidad y generando problemas graves a sus residentes.
Durante la administración de Enrique Iván González, sin que estuviera el fraccionamiento al 100 por ciento, fue recibido por su administración, cuando era responsabilidad de la misma empresa dejar todo en óptimas condiciones.
Sin embargo, el Alcalde Oscar Rosas González, con él afán de ganar votos en temporada de elecciones, prometió a los habitantes de esta zona darles una solución inmediatamente cuando ganara la presidencia municipal, la cual no ganó, pero se adjudicó de mala forma.
“El Ayuntamiento nos tiene engañados, solamente ha venido a darnos falsas promesas, personas como el director del Smapac, Obras Públicas han venido a hablar con todos nosotros, nos prometen y dan solución breve a la situación en la que vivimos, pero sinceramente solo se tiran la bolita unos a otros”.
Asimismo indicó, “el Presidente Municipal Oscar Rosas González se hizo el compromiso de ayudarnos cuando anduvo pidiendo los votos, él es el responsable del municipio y al le exigimos que nos dé solución a la brevedad posible, esto es un foco rojo de infección, donde nos puede llevar a enfermados graves como el cólera, a los niños y personas adultas que vivimos entre todo esto”, expresó la ciudadana.
Cabe mencionar que toda la calle está en las mismas condiciones, pues el agua de heces fecales cubre gran parte de la vía, donde incluso la gente tiene que caminar dentro de estas aguas residuales.
“Esto llega al grado de que tenemos que vivir encerrados dentro de nuestras casas, no podemos siquiera salir a tomar fresco, si queremos comer en la mesa no se puede, ahorita con las altas temperaturas no se puede, todo se evapora y aunque nos quedemos dentro de las casas el polvo ingresa a las viviendas y es terrible”.
(Texto y fotos: Ignacio Morales)