CAMPECHE, Cam., 27 de julio.- El empresario Carlos Mengual denunció que el titular y el director de Alcoholes de la Comisión para la Protección Contra Riesgos Sanitarios del Estado de Campeche (Copriscam), Santiago Rubén Rodríguez Adam y Alberto Joaquín Pacheco Pérez, respectivamente, utilizan este organismo como instrumento de venganza contra empresarios competidores y de protección a determinados grupos.
Denunció que estas personas realizan inspecciones arbitrarias bajo el supuesto de la existencia de irregularidades, y proceden con la clausura o, en su caso, exigen cosas imposibles como el cambio de la ubicación del negocio, con la única intención de eliminar competencias.
Narró que hace un par de días, en una inspección del Copriscam, el director de Alcoholes llegó a un bar ubicado en la avenida Francisco I. Madero para clausurar el lugar, bajo el supuesto de que no ofrecían los alimentos anunciados en su carta, pese a que cuando se ejecutaba la supervisión, diversos clientes les decían a los inspectores que ya habían comido, ni aun así hicieron caso, por lo cual procedieron a la clausura del lugar.
“Clausuraron porque supuestamente no se están consumiendo alimentos, pero en la Ley de Alcoholes se establece que en los restaurantes se pueden consumir bebidas alcohólicas antes, durante y después de los alimentos, entonces, hay gente que estaba terminando de consumir sus alimentos y cervezas cuando nos clausuraron, pese a haber verificado que en la cocina tenemos para preparar alimentos”.
Detalló que tras la acción, él le comentó al director de Alcoholes de la Copriscam que tenían alimentos y las herramientas para preparar comida, lo cual dijo fue ignorado, como si la clausura ya estuviera ordenada desde los mandos superiores.
Cabe destacar que el afectado recordó que se han desatado diversas clausuras contra los negocios familiares, con más de 16 años en el ramo, siendo un ejemplo de lo mencionado un conocido bar ubicado sobre la calle 12, a la altura del Cinema Estelar, que fue clausurado de manera irregular y ahora les están pidiendo remover el local, porque según afecta la imagen de la iglesia de San Francisquito.
Su petición dijo es porque existen otras personas que están protegidas por la Copriscam, como en la calle 59, a quienes se les permite trabajar a deshoras, las 24 horas del día, sin realizarles operativos de inspección o vigilancia.
Agregó que está difícil la situación como para seguir permitiendo más atropellos, pues como dijo antes, hay quienes dependen del negocio, como su familia y varias familias campechanas, y lo lamentable es que ese organismo se utilice como instrumento político de venganza y protección para ciertos grupos de empresarios.
(POR ESTO! / Campeche)