HOPELCHEN, Cam., 6 de junio.- Las inundaciones y viviendas y campos de cultivo, caminos, carreteras y el deslave de las calles son la manera en que la naturaleza nos está cobrando el daño que le hemos hecho, lamentó la profesionista en Derecho, Jhoana Areli Ramos Pérez, entrevistado en el marco de la celebración del Día Mundial del Medio Ambiente, el pasado viernes 5 de junio.
En entrevista con POR ESTO!, Ramos Pérez aseguró que el Día Mundial del Medio Ambiente fue la ocasión propicia para la reflexión, sobre todo por los recortes presupuestales a dependencias relacionadas, entre ellas la Comisión Nacional para el Conocimiento y Uso de la Biodiversidad (Conabio), la Comisión Nacional del Medio Ambiente (Conam) y otras dependencias como la Conafor, la Profepa y la Semarnat.
“Prácticamente se ha dejado a un lado el cuidado del medio ambiente porque una institución oficial difícilmente podrá cumplir con su programa operativo si le quitan el 75 por ciento de sus recursos”, señaló.
Abundó en que las tormentas tropicales “Amanda” y “Cristóbal” afectaron al municipio de los Chenes, derivado de la afectación del medio ambiente, ya que la deforestación impide que las aguas sean capturadas por el follaje y las raíces, ya que sin una barrera natural que pueda absorber y dispersarlas, las corrientes de agua se acumulan provocando inundaciones y afectando viviendas, superficies habilitadas para la agricultura, animales domésticos y las actividades productivas que aportan la economía como la apicultura, agricultura y la ganadería.
Otro daño que le hacemos al medio ambiente se genera con el uso indiscriminado de los productos agroquímicos, a la aplicación manual le sigue la aplicación con maquinaria y equipo por medio de tractores, y ahora se agrega la fumigación aérea y con ello se daña aún más a la naturaleza, ya que los químicos pueden viajar varios kilómetros fuera de los cultivos por acción del viento y el agua, por lo que afecta a la flora y fauna nativa eliminando insectos esenciales como la abeja y contaminando cuerpos de agua como aguadas, cenotes y aguas subterráneas, que muchas veces se utiliza para consumo y uso doméstico, lo cual poco a poco envenena a la población.
Remarca que la codicia de algunas personas es tal que provocan incendios intencionalmente con el propósito de quemar monte alto para después ser convertidos en tierras para cultivo, acción que se presentó en múltiples ocasiones en todo el municipio en los meses de marzo y abril, lo que afectó los postes eléctricos, de telefonía y televisión por cable, cuando las llamas llegaban a la orilla de la carretera; cabe destacar que no se detuvo a ningún responsable por estas acciones.
Como joven, la profesionista ve con preocupación el avance del cambio climático más aún porque por el momento no hay políticas amigables con el medio ambiente, por el contrario, se está dejando a un lado las energías limpias y renovables para seguir con prácticas antiguas y obsoletas que utilizan el combustóleo y el carbón para generar energía eléctrica, mientras en otros países desde hace algunos años han empezado la transición hacia las energías alternativas.
(Jorge Alberto Uc Moreno)