Ante el peligro que representan enormes clavos de acero salientes de topes instalados en calles de la ciudad, vecinos de algunas colonias han optado por usar sus martillos para colocarlos en su lugar, y es que, según testigos, decenas de vehículos y motocicletas han ponchado sus llantas, además de que algunos otros, por tratar de esquivar esas trampas viales, han derrapado.
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A decir de los testigos, la Dirección de Protección Civil y Ordenamiento Vial no supervisa que la empresa que provee tal material haga adecuadamente el trabajo.
Según denunciaron Javier Martínez Solano, Mónica López Sánchez y Jeremías López Pérez, habitantes de la colonia Justo Sierra, no está mal que en algunas calles sean colocados topes con tal de frenar el exceso de velocidad con el que algunos automovilistas y motociclistas circulan; el problema es que los colocan sin percatarse que estos queden firmes.
Explicaron que, como todo, por el uso y paso de vehículos estos van aflojándose, entonces, si no hacen perforaciones profundas para meter los enormes clavos de acero, en escasos días estos objetos empiezan a salirse, por lo que optaron por tener que usar un martillo para poder clavar varios en un tope instalado en la avenida Camarón.
Los vecinos argumentaron que, si bien estos trabajos son ejecutados por un particular que provee los topes y su instalación, es obligación de la Dirección de Protección Civil y Ordenamiento Vial vigilar que sea correcto, porque además del daño que genera al poncharse las llantas, también podría ocurrir una desgracia, al derrapar alguien y clavarse un objeto de estos.
“Como vecinos no criticamos que haya muchos topes, lo que sí señalamos es que se coloquen sin las debidas medidas de seguridad. Es un peligro que estén esos clavos salidos. Hemos visto decenas de autos y motocicletas a las que se les han ponchado las llantas. El problema es que no es una pinchadura de un tornillo normal, son rajaduras que prácticamente hacen tener que volver a comprar una llanta, y eso es nada en comparación de que alguien se lesione”, señaló Martínez Solano.
Vecinos de la colonia Justo Sierra insisten en que el personal del Ayuntamiento de Carmen, como los que compran y contratan este tipo de servicios, tienen que ser más observadores en el resultado final, ya que, si bien ordenan dónde colocarlos, lejos de ser para seguridad vial, se convierte en un riesgo para todo tipo de conductor de vehículos.
JGH