
Vecinos del Fraccionamiento San Miguel colocaron carteles de protesta en el acceso principal, en rechazo a la construcción de un cárcamo en la glorieta, pues afirman que además de alterar la imagen urbana, podría intensificar las inundaciones que comúnmente se presentan en la calle principal.
De acuerdo con varios habitantes, el pasado domingo personal del Ayuntamiento de Carmen se reunió con ellos para informarles que el lunes iniciarían obras de pavimentación en las primeras arterias del fraccionamiento. El proyecto contempla comenzar con la calle San Miguel, entre avenida Isla de Tris y Martelli, seguida de San Miguel Norte y finalmente San Miguel Sur. Sin embargo, dicha intervención incluye la construcción del cárcamo en el acceso principal, lo que implicaría derribar la glorieta que da la bienvenida al complejo habitacional.
Según explicaron, la primera reunión no tuvo avances significativos. El personal del Ayuntamiento, acompañado de ingenieros de la empresa, realizó cuatro acercamientos en el mismo día, sin lograr acuerdos. De las 300 viviendas que conforman el fraccionamiento, solo participó el 50 por ciento de los habitantes, y la inconformidad principal radica en que consideran que la obra no los beneficiará.

Los vecinos argumentan que la calle principal se inunda cada vez que llueve, y algunas casas en los andadores también sufren encharcamientos, debido a que el hotel Hampton Inn, colindante con el fraccionamiento, quedó a un nivel más alto, provocando que el agua pluvial se estanque en la zona. Temen que el cárcamo concentre el agua de San Miguel y del Fraccionamiento Reforma, agravando la acumulación.
Además, señalaron que la instalación hidráulica generaría ruido constante y una mala imagen urbana en el acceso principal. Por estos motivos, los vecinos rechazaron el inicio del proyecto.

Noticia Destacada
Centro Federal de Conciliación evalúa elección sindical de la universidad Autónoma de Carmen
La situación ha generado opiniones divididas: algunos afirman que la obra no resolverá las inundaciones, mientras otros sugieren que existe un mejor lugar para construir el cárcamo, lejos de la entrada del fraccionamiento.
Los habitantes temen que, al no permitir el desarrollo del proyecto, el Ayuntamiento de Carmen redirija la inversión a otra colonia. Además, el hecho de haber colocado carteles de protesta sin consenso general podría agravar el conflicto vecinal.
JGH