Pedro de la Hoz
De un tiempo a esta parte, Silvio Rodríguez, en Cuba, no suele cantar en teatros ni estadios ni salas de concierto. Fuera de la isla, sí, pero en La Habana y otras ciudades de su país ha elegido el contacto directo con comunidades en su mayoría ubicadas en la periferia de los centros urbanos. A ese programa él llama Gira por los Barrios, y otros, con razón, Gira interminable, porque nunca acaba. La más reciente presentación tuvo lugar en una nueva urbanización del municipio Cerro, en la capital, donde antes hubo un espacio yermo, y las brigadas estatales de la construcción con la colaboración de los pobladores levantaron una serie de edificios al final de la calle Primelles, para ser habitadas por gente muy humilde, afectada por derrumbes y fenómenos atmosféricos o por diversas situaciones de extrema vulnerabilidad social.
Fue ese el concierto número 95 de la gira y en la primera parte ocupó la escena un trovador mexicano, Gerardo Pablo, quien ya con su primera canción ganó la aprobación de los vecinos y de muchísimas personas que llegaron hasta allí, entre estas los cerca de 200 integrantes de la Tropa Cósmica, comunidad internacional de seguidores de Silvio, promotores de valores solidarios, que acordaron encontrarse en La Habana por estos días.
Gerardo, poblano de 41 años de edad que reside actualmente en Tijuana, se mueve al margen de los circuitos comerciales de la industria del espectáculo. Ha hecho carrera en conciertos y grabaciones sin concesiones de ningún tipo. Canta lo que piensa y piensa como canta. Se siente deudor de la trova encarnada por el yucateco Guty Cárdenas, a quien dedicó uno de sus entrañables temas, Caminante, cuya versión más conocida la compartió con Alejandro Fillo, así como de la canción de autor hispanoamericana y sus referentes mayores, Silvio Rodríguez, Joan Manuel Serrat, Pablo Milanés, Joaquín Sabina, Danny Rivera y Luis Eduardo Aute.
Precisamente Aute hizo suya la canción con la que Gerardo abrió su presentación en la calle Primelles, Houdini, parábola en la cual a partir de la mítica saga del famoso escapista el trovador incita a reflexionar acerca de la necesidad de rebasar encierros espirituales y conquistar la libertad.
El cantautor mexicano exhibió un muy coherente espectro de posibilidades expresivas. Mientras en Ríete Teté recrea divertidamente los aires de cumbia que solía escuchar en las fiestas populares de su ciudad natal, en La voz de los de adentro mostró la intensidad de una cuerda lírica comprometida con el destino humano.
Gerardo es el autor de uno de los discos más originales de la cancionística mexicana contemporánea, Los numerosos nadies (2008), inspirado en viñetas escritas por el uruguayo Eduardo Galeano.
El anfitrión confesó la alegría de contar con Gerardo para este concierto. “No lo conocía personalmente –dijo Silvio– pero cuando escuché sus discos quedé convencido de que estaba ante un compositor muy interesante. De manera que lo invité a los Estudios Ojalá, que yo dirijo, y lo convidé para que ofreciera sus canciones a los pobladores de este barrio”.
Poeta y promotor cultural destacado en la comunidad de Primelles, Lázaro Castillo, declaró a POR ESTO!: “Encontrarnos con Gerardo Pablo es un privilegio; México tiene en él a un trovador auténtico y ello, como has observado, no ha pasado inadvertido para los vecinos, particularmente los jóvenes. Este fue un primer paso, la obra de Gerardo merece ser mejor conocida en lo adelante”.