
Una controversia deportiva ha estallado desde Tbilisi, Georgia, donde tres esgrimistas mexicanos han lanzado una denuncia pública contra el Comité Olímpico Mexicano (COM) y la Federación Mexicana de Esgrima (FME), acusándolos de arrebatarles sus lugares en los Juegos Panamericanos Junior Asunción 2025.
Vanessa Chávez, Elliott Barreto y Máximo Azuela, especialistas en sable y florete, aseguran haber clasificado legítimamente pero fueron excluidos tras un nuevo proceso selectivo que consideran irregular.
El caso revela profundas tensiones institucionales en el deporte mexicano y reabre el conflicto entre federaciones rivales que disputan el control de la esgrima nacional.
Vanessa Chávez, Elliott Barreto y Máximo Azuela utilizaron las redes sociales como plataforma para hacer llegar su mensaje a la opinión pública, buscando apoyo para su causa y visibilizando un problema que trasciende lo meramente deportivo.
A través de un video cargado de emoción y frustración, los especialistas en sable y florete expresaron su indignación por haber quedado fuera de los Juegos Panamericanos Junior Asunción 2025, programados del 9 al 23 de agosto, pese a haber obtenido sus lugares mediante competencias previas.
Elliott Barreto, con evidente emoción, declaró: "Fue un esfuerzo conjunto y no se me hace justo que después de todo, alguien venga a quitarnos algo que nos pertenece". Sus palabras reflejan no solo la frustración personal, sino también el sentimiento de injusticia que comparten los tres atletas.