Internacional

Marcha de Mujeres contra Trump

WASHINGTON, EE.UU., 19 de enero (EFE).- Miles de personas se manifestaron hoy en el centro de Washington en la llamada Marcha de Mujeres, que cumple su tercera edición, para protestar contra las políticas del presidente estadounidense, Donald Trump.

En un ambiente festivo, a la vez que reivindicativo, mujeres de todas las edades y de distintas partes del país, y algún que otro hombre, se dieron cita en la plaza Freedom (libertad) y a lo largo de la avenida Pensilvania, que conecta la Casa Blanca con el Capitolio, y otras calles aledañas.

Muchas de las participantes llevaban gorros de lana de color rosa, que les ayudaron también a protegerse del frío que hoy reinaba en las calles de la capital.

Según pudo constatar Efe, las manifestantes portaban carteles con mensajes de lo más variado, como “Cuida de tu propio útero”, “Exigimos igualdad para todos”, “Sin Hermione, Harry (Potter) hubiera muerto en el libro 1”, todos ellos en inglés, aunque también se veía alguno que otro en español como “Chingona como mi madre”.

Gail Leiser, residente en el estado de Maine, acudió a la protesta en Washington, junto a varias compañeras activistas con coronas verdes de cartón en la cabeza, el mismo color del logotipo de su organización “Indivisible MDI” (Indivisible MDI, siglas en inglés de la isla Mount Desert de Maine), que aglutina a vecinos de esa zona frente a lo que califican “autoritarismo” de Trump.

“Las mujeres estamos preocupadas por nuestra democracia y por nuestros derechos que están siendo arrebatados, y viraje del país hacia la extrema derecha”, dijo Leiser a Efe al ser preguntada sobre sus motivaciones para asistir a la protesta.

Washington no es el único lugar de EE.UU. que acoge hoy esta manifestación, ya que también se están desarrollando en otros lugares como Nueva York o Los Ángeles.

Las organizadoras de la Marcha de Mujeres reconocieron que resulta complicado calcular la participación en todo el país, aunque señalaron que se están celebrando casi 300 protestas a lo largo y ancho de Estados Unidos.

En Nueva York

En Nueva York, la tercera edición de la “Marcha de las Mujeres” se realizó dividida en dos manifestaciones rivales tras un choque entre líderes del movimiento.

En las inmediaciones de Central Park, las organizadoras de las protestas celebradas en la ciudad los dos años anteriores encabezaron una nueva protesta para exigir igualdad y mostrar su oposición a las políticas de Trump.

Con pancartas como “Respeta mi existencia o espera mi resistencia”, “Las mujeres son el muro y Trump lo va a pagar” o “Nuestros cuerpos, nuestras mentes, nuestro poder”, las participantes marcharon desde el conocido parque hacia el centro de Manhattan, pasando por delante de la torre que lleva el nombre del presidente y donde residía hasta su elección.

A cierta distancia, en el extremo sur de la isla, tuvo lugar otra concentración impulsada por el capítulo local de la organización responsable de la marcha nacional que se celebró en Washington.

El grupo, que este año celebraba por primera vez su propia protesta en Nueva York, no logró unir fuerzas con la otra protesta pese a varias conversaciones durante los últimos meses.

En el centro de la fractura estuvieron las acusaciones de antisemitismo contra algunas líderes del movimiento nacional, en especial la palestino-estadounidense Linda Sarsour, muy crítica con las políticas del Gobierno israelí, y Tamika Mallory, quien ha apoyado públicamente al jefe del movimiento “Nación del Islam”, Louis Farrakhan, conocido por polémicas palabras contra los judíos.

Esa situación llevó a organizaciones judías y otros grupos a distanciarse en Nueva York de sus iniciativas y a la organización de la marcha original celebrada en la ciudad a insistir repetidamente en diferenciar las dos iniciativas.

Algunos, en especial políticos locales, optaron hoy por asistir a ambas protestas.

En Los Ángeles

En Los Ángeles, la marcha comenzó en Pershing Square y terminó con un acto multitudinario en las escaleras del Ayuntamiento de la ciudad californiana.

Con un marcado carácter festivo y aprovechando un día soleado tras una semana de lluvia en Los Ángeles, los participantes reivindicaron, entre otros aspectos, la igualdad de género, el derecho al aborto, que se persigan los abusos y agresiones sexuales (con muchas referencias al movimiento “Me Too”), el respeto a la comunidad LGBT o el acceso de las mujeres a los puestos de poder.