MONTEVIDEO, Uruguay, 5 de marzo (EFE).- El bajo crecimiento económico, la compleja situación fiscal y las altas expectativas de la población marcan un futuro desafiante para Latinoamérica, que afronta realidades divergentes y está sumida en tensiones sociales, explicó el economista jefe para América Latina y el Caribe del Banco Mundial, Martín Rama.
El especialista uruguayo señaló en un encuentro con la prensa en su país que tras una “década de oro” en la que el crecimiento llegó a alcanzar un promedio de más de 4 %, Latinoamérica ha vuelto a un ritmo de crecimiento económico lento.
“(La década de oro) fue un período en que la bonanza permitió avanzar en políticas sociales, se redujeron la desigualdad y la pobreza, pero una vez que el ‘boom’ de las ‘commodities’ se terminó, estamos volviendo al tipo de tasa de crecimiento que teníamos antes como región, que en promedio está por debajo de la de los países avanzados”, explicó.
En ese sentido, el economista acotó que, según la subregión, la situación es más o menos compleja, ya que los países de Centroamérica, el Caribe y el Pacífico crecen un poco más, con Panamá como ejemplo de un crecimiento ligado a la inversión, mientras que los del Atlántico, como Argentina, Brasil o Uruguay, tienen más dificultad.
A su vez, Rama destacó que más allá del bajo crecimiento la conducción económica en la región no ha sido buena en la denominada “prociclicalidad fiscal”, es decir, que en tiempos de bonanza el gasto público no se redujo para ahorrar sino que aumentó exponencialmente por lo que la situación fiscal latinoamericana no es la ideal.