
La Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC) anunció la detención de José Antonio “N”, alias “El Chaparro”, presunto operador de la célula Los Aquiles —vinculada al Cártel del Pacífico— durante un cateo efectuado la mañana del 3 de junio en la colonia Los Altos de Tijuana, Baja California.
El titular de la dependencia, Omar García Harfuch, detalló que la captura fue posible gracias a labores de inteligencia coordinadas entre la SSPC, la Fiscalía estatal, la Guardia Nacional, la Marina, la Secretaría de la Defensa Nacional y la Fiscalía General de la República.
En la operación se incautaron 15 kilogramos de droga —presuntamente metanfetamina y cocaína—, 500 pastillas con características de fentanilo, tres armas largas, cinco cargadores y 300 cartuchos útiles.
Una imagen difundida por el funcionario muestra al detenido, de 42 años, junto al cargamento asegurado.
Fuentes del gabinete de seguridad identifican a “El Chaparro” como subordinado directo de Édgar Vicente Escobar Rodríguez (“Chore” o “Camarón”), operador de René Arzate García (“La Rana”), considerado segundo al mando de Los Aquiles.
El grupo controla rutas de trasiego de drogas sintéticas y cocaína hacia California y ha sido señalado por múltiples homicidios en la frontera.
De acuerdo con el comunicado oficial, agentes federales realizaron vigilancias fijas, móviles y discretas durante varias semanas para recabar pruebas que un Juez de Control valoró al otorgar la orden de cateo.
Tanto el detenido como la evidencia quedaron a disposición del Ministerio Público de la Federación; se prevé que enfrente cargos por delitos contra la salud, posesión de armas de uso exclusivo del Ejército y homicidio.
La SSPC enmarca esta aprehensión en la estrategia de “Cero Impunidad”, que suma más de 3 400 detenciones de generadores de violencia desde febrero, con énfasis en la frontera norte.
El secretario García Harfuch subrayó que se mantendrán los operativos conjuntos para “desarticular la logística financiera y operativa” de los cárteles y devolver la paz a Tijuana, una de las ciudades más afectadas por el mercado de fentanilo y la disputa entre organizaciones criminales.