Hugo Carbajal Aguilar
Decíamos que MORENA cuenta con personajes de valía intelectual que están participando en el Instituto Nacional de Formación Política o en alguna Comisión importante para las elecciones internas que están ya en puerta. Armando Bartra, Rafael Barajas “El Fisgón”, Pedro Salmerón, Paco Ignacio Taibo y Enrique Dussel están comprometidos en esta tarea de orden nacional tan importante como urgente e interesante.
MORENA está ya cundido de arribistas y hábiles oportunistas que han vivido del erario durante toda su inútil existencia, dicho esto con suficiente enjundia y plena objetividad. Gente que nunca ha trabajado, aun cuando algunos cuentan con un diploma que les acredita en alguna profesión de carácter universitario y ahora se suben al barco que está a flote y navegando después de haberse hundido el propio en busca de empleo. Una vez que probaron las delicias de una ración de poder se quedaron pululando y medrando en grillas de partido aprendiendo cómo estorbar a sus propios colegas y supuestos compañeros, cómo competir denostando a otros y cómo insertarse en la siguiente agrupación ganadora de un puesto público municipal o distrital.
De ahí que Talleres de Formación Política e Ideológica trabajados con acuciosidad, responsabilidad y argumentación suficiente de orden histórico, político y económico así como cultural tuvieron éxito emotivo e intelectual pero fracaso absoluto en las estructuras de partido para que se autocriticara, se reformara y enriqueciera sus prácticas revolucionarias.
Afirmo esto con absoluta contundencia porque alguna vez –más de una– fui invitado a participar en un Diplomado que precisamente se generó gracias, entre otras cosas, a una insistencia personal con programa incluido. Diplomado que se llevó a cabo en el Auditorio Emiliano Zapata de la UAEM. Todo esto con el PRD cuando aún suponíamos que tendría alivio en sus penas y éxito en sus propuestas. Esta agrupación se empachó enajenada por el poder y fue agandallada por individuos sin escrúpulos, los Chuchos y su banda, enamorados de quien ganara para abandonar principios, firmar cuanto les indicaran y continuar embebidos en sus potajes.
Pero, ¿cuál debería ser la primigenia intención de este triunfo popular que ha decidido cambiar el rumbo económico y político de nuestro país?
Y aquí nos ayuda una reflexión que preguntara por qué. Es decir, el sistema impuesto, Neoliberalismo, sólo pide alguien que apriete el botón para continuar con la misma maquinaria, no le interesa que se le pregunte qué hay detrás de ese botón. Hay pobreza sí, pero así es, ni modo, y cuando alguien pregunta por qué, los defensores de este sistema se indignan y lo acusan. Así como platicaba Don Helder Cámara: Cuando di de comer a unos pobres me llamaron cristiano. Cuando pregunté por qué había tantos pobres me llamaron comunista.
Esa debería ser la labor de un partido de oposición. Preguntar, cuestionar el sistema establecido y señalar esas cosas que ocurren como justas o injustas.
De ahí que Don Enrique Dussel afirme: La Etica es la reflexión más profunda del ser humano. Es la racionalidad fundamental. Los principios éticos son constitutivos esenciales de la Política que han sido soberanamente abandonados por los partidos. Creen que la Política está aquí en algún lado y la Etica, junto con lo que llaman valores, por otro. Es más, que puede haber un buen político sin que tenga que tomar en cuenta a la ética.
Esos principios éticos son de tiempos ya muy lejanos –cinco mil años antes– si comparamos por ejemplo el Mito de Osiris, esa divinidad egipcia que juzga a quien ha muerto y emprende el viaje hacia la otra dimensión.
(El Mito es una propuesta narrativa racional. Es una narrativa racional con base en símbolos (Paul Ricoeur) para explicar momentos de nuestra vida, no debe ser confundido únicamente como si fuera un cuento infantil).
Osiris pregunta:
–¿Qué has hecho de bueno para merecer la resurrección?
–Y éste contesta: Di de comer al hambriento, de beber al sediento, de vestir al desnudo y una barca al peregrino.
Igualmente, 30 siglos después, el fundador del cristianismo habla de un mandato que consiste precisamente en: dar de comer al hambriento, de beber al sediento, de vestir al desnudo, de sanar a los enfermos, de dar posada al peregrino y de atender y con especial predilección al forastero, al huérfano y a la viuda como ejemplos de gente más necesitada.
Y casi 2 mil años después, Marx y Engels citan como primeras necesidades y obligaciones de orden político social: comer, beber, vestirse y habitar. Los egipcios, los judíos, los cristianos y Marx y Engels, fundadores del socialismo, coinciden en señalar estos primeros satisfactores comer, beber, vestirse y tener una morada donde habitar, como necesidades y obligaciones comprometidas de los seres humanos. No es una simple coincidencia.
El Primer principio ético es justamente Afirmar la vida.
El Segundo consistiría en el Cómo para que haya un consenso comunitario, un acuerdo establecido de la comunidad en busca de resolver estas urgencias.
Y el Tercero, consiste en lograr que ese acuerdo común se haga posible o dentro de lo posible que tiene que ver precisamente con la labor Política, es decir, la relación intrínseca entre Etica y Política.
La Etica tiene que ver así con la Política con quien se vincula estrechamente. No es una ética de valores abstractos sino una ética que tiene que ver con la vida. Un político que distribuye los bienes está cumpliendo con un compromiso ético y está haciendo realidad la labor política. Un político que genera perversidad, indigencia, marginación y muerte, está condenado al ostracismo. De ahí el reclamo persistente e insistente en favor de nuestros jóvenes desaparecidos, en favor de nuestros grupos originarios, en favor de las mujeres violentadas…
La labor de un partido tiene que ver con esa formación ideológica, con esa consistencia subjetiva de reconocerse como servidor del pueblo necesitado, obedientemente porque el mandante es el pueblo que tiene el poder. Ese poder que no reside en el gobierno ni en el Estado. No. Ni mucho menos, en el individuo electo para ejercer una tarea de ese orden. El poder reside en el pueblo y es a él precisamente a quien nos vemos obligados a obedecer.
El Ejército Zapatista de Liberación Nacional, los presidentes de Bolivia y México, Andrés Manuel y Evo Morales han señalado esto: Mandar Obedeciendo y no andar buscando puestecitos chantajeando amistades y vecinos para salirse con la suya.
Veamos, Friedrich Hayek, papá de los neoliberales dijo: El progreso exigió la represión gradual de estos dos principios básicos: el altruismo y la solidaridad. Es decir, asume que lo mejor es el recalcitrante egoísmo, la individualidad, la hostilidad, la agresividad.
Acá de este lado se trata de la solidaridad, la generosidad, la entrega, la responsabilidad, la justicia. Hagamos nuestra elección, tomemos partido.