Por Olivia Vázquez
Uno de los proyectos ancla que genera una promoción directa al destino y amplia atracción del turismo internacional, el Museo Subacuático (Musa) de Cancún, se encuentra estancado y este año estará sufriendo una retracción derivado de la falta de recursos y apoyos para seguirlo desarrollando. Así lo reconoció Roberto Díaz Abraham, presidente de Musa en Cancún, quien refirió que mientras se desperdicia esta gran oportunidad, destinos como Brasil estarán iniciando Musa en la parte caribeña al reconocer el éxito que le ha dejado este museo a este destino.
El directivo informó que a pesar de que no se recibe ningún tipo de apoyo, el museo sigue siendo una maravilla en términos de promoción y mantiene el interés de medios y empresas internacionales como Alaska Airlines que estará incluyendo en los próximos días un video reportaje de las galerías subacuáticas en Cancún y cada semana se tiene un medio internacional o nacional que trae información al respecto. Colombia, dijo, es uno de los países que está haciendo una fuerte difusión del museo y que siempre pide la actualización de las acciones que se van realizando.
Todo ello, expresó, a pesar de que se llevan dos años sin que se pueda realizar una sumersión nueva derivado de la falta de recursos para seguir fortaleciendo estas galerías subacuáticas, que cumplen la función no sólo de atraer turismo sino principalmente han permitido la descarga de los arrecifes naturales y han generado nuevos ecosistemas marinos muy interesantes.
En cuanto a los planes de crecimiento, refirió que este 2019 Musa enfrentará un año de retracción: “Nos vamos a hacer más pequeños de lo que ya somos, porque sin recursos y sin apoyo no se puede hacer nada y se harán modificaciones en el administrativo para evitar que se pueda entrar a más deterioro en tanto se puede avanzar en los permisos que están a nombre de la Comisión de Áreas Naturales Protegidas para que se pueda seguir avanzando en la sumersión y en el sostenimiento de este proyecto ecocultural y turístico único en el mundo”.
“Se tienen 30 esculturas listas para sumersión pero se requieren los permisos de la Conanp y hacer los trámites necesarios para obtener los permisos, pero sin recursos esto se vuelve muy complicado”, dijo.
Actualmente, Musa cuenta con 516 esculturas sumergidas que conforman la gran evolución del hombre y en la parte de creación, se están realizando columnas con una donación que se realizó al museo de coral muerto, que “pretenden sumergir para revivirlo” (sic), lo que sería una maravilla pero primero se tienen que conseguir los recursos y los permisos.
En este sentido, también informó que las aportaciones voluntarias que realizaban cuatro o cinco marinas para el ingreso al museo también se dejaron de hacer a finales del año pasado, lo que calificó como “una gran lastima”, porque se está desperdiciando un proyecto que es reconocido a nivel mundial y que es un soporte importante de la promoción y atracción turística del destino, pero parece que nadie lo ve ni lo aprovecha, mientras que a nivel internacional se identifica perfectamente como uno de los principales atractivos de la región.