Por Lusio Kauil
JOSE MARA MORELOS, 7 de octubre.- La encargada y vocal ejecutiva del comedor comunitario de La Presumida, Dianell Carrillo Che, dirigió un escrito a la asamblea ejidal del poblado y a los medios de comunicación, en el que refiere que las autoridades ejidales que se llevaron los muebles y utensilios en junio pasado sí son rateros, porque mintieron a la autoridad para protegerse de la ley que ya los estaba acorralando.
La mujer describe en el documento que el 15 de junio pasado se encontraba realizado el aseo en el comedor para hacer la entrega del inmueble al comisariado ejidal y al delegado del poblado, a fin de deslindarse de esa responsabilidad.
Apunta que ese día llegaron los señores Orlando Cahuich y Filiberto Sosa, comisariado y consejo de vigilancia del ejido de La Presumida, y las expulsaron del lugar, después ellos cargaron todos los muebles y utensilios de cocina y se los llevaron.
Indicó que a raíz de ese hecho, ellas acudieron a interponer una denuncia en la Fiscalía y ante la Procuraduría Agraria. Esas dos instancias citaron a las dos autoridades mencionadas para que comparecieran, a fin de que se aclarara el caso, pero nunca lo hicieron, agregó.
Expuso que esas dos personas buscaron la asesoría de un abogado cuando se sintieron presionadas por las instancias mencionadas, y el licenciado les aconsejó que fueran a la delegación de la Secretaría de Bienestar en la ciudad de Chetumal a mentir para que les diera un documento de resguardo de lo que habían sacado ilegalmente, del comedor comunitario, para que no les cayera todo el peso de la ley. Pero esto lo hicieron 20 días después de haber cometido el robo, hizo ver.
Dijo que cuando ellas viajaron a la ciudad de Chetumal para explicar la verdad al delegado de la Secretaría Bienestar, el funcionario tuvo que mandar a realizar una investigación del caso, y fue hasta entonces que pidieron a esas autoridades que devolvieran lo que se habían llevado del comedor.
En el escrito, fechado el 7 de octubre, Dianell Carrillo Che dijo que las mujeres del comité del comedor nunca contrataron abogado para que las defiendan, porque según ellas, siempre se condujeron con la verdad y no tenían necesidad de engañar y hacer componendas legaloides para esquivar la ley.
Expresó que, por el contrario, las dos autoridades ejidales mintieron y, por tanto, actuaron como delincuentes, pues en una nota que publicaron la semana pasada decían que habían personas ajenas al comedor que trataron de adueñarse de los muebles y utensilios de cocina para repartirse entre ellas, cosa que es completamente falso, ya que quienes estaban en el lugar cuando las autoridades llegaron éramos las mujeres que habíamos trabajado más de cinco años en el comedor, preparando alimentos a las personas de escasos recursos de la comunidad.