Quintana Roo

La Yaxchilán en vida suspendida

Por Yolanda Gutiérrez

 

Imposible repuntar la actividad comercial ni mucho menos la vida nocturna de la que por muchos años gozó la avenida Yaxchilán, que no logra levantar a nivel turístico, salvo en los puntos donde se ubican hoteles que sólo durante las temporadas alta alcanzan buenos niveles de ocupación.

Es  que se cuentan por docenas los locales abandonados, en venta o renta que se ubican sobre la antaño popular avenida y calles aledañas, otrora una de las principales arterias en la que se desarrollaba la vida nocturna de la ciudad y hoy por hoy prácticamente abandonada.

Apenas unos cuantos transeúntes, entre ellos algunos turistas, caminaban el sábado en la mañana por la Yaxchilán bajo un aplastante sol, siempre buscando las sombras que arrojan los árboles, algunos de ellos tan grandes que las raíces empiezan a intentar abrirse camino sobre las banquetas; de hecho, con la remodelación dos o tres ejemplares fueron mutilados precisamente para evitar el problema, según comentaron empleados de negocios que permanecen en operación contra viento y marea.

Si bien es cierto que han abierto algunos nuevos negocios, especialmente en inmuebles que ocuparon discotecas, la popular avenida prácticamente duerme el sueño de los justos pese al proyecto enfocado a su reactivación.

Inclusive en últimas fechas cerró el restaurante Los Arcos, que hoy en día aparece con su porche completamente desmantelado, sin barandal ni jardineras.

En abril del 2012 ocho negocios de diferentes giros fueron balaceados por un grupo armado, situación que en aquellos entonces movilizó a los empresarios de la populosa arteria con la exigencia de mayores medidas de seguridad, pero lamentablemente las autoridades hicieron caso omiso y desde entonces, de manera paulatina, restaurantes, bares y comercios de otros giros han bajado cortinas y cerrado de manera definitiva.

Comerciantes que aún subsisten en la avenida Yaxchilán lamentaron que el Ayuntamiento no implemente un plan real para levantar la economía de esa vialidad y la de las calles aledañas que comunican con el Parque de Las Palapas, en las que existen muchos locales con sus cortinas cerradas por oxidados candados, señal de que no se han tocado en mucho tiempo, aparentemente sin planes ni proyectos para su reactivación a corto plazo.

“Honestamente, pensábamos que con la remodelación de la Yaxchilán nos veríamos beneficiados de una u otra forma, que se reactivarían la mayor parte de los negocios que llevan cerrados por años, pero la realidad es que han pasado más de cuatro años desde que se hicieron los trabajos y a pesar de estas obras de embellecimiento, la avenida sufre un proceso de deterioro y cada día se mira más depauperada, con tanto local envejecido, abandonado y algunos prácticamente en ruinas”, expresó la encargada de un pequeño negocio de abarrotes que sobrevive gracias a las escasas ventas que logra con los vecinos.