Por Lusio Kauil
José María MORELOS, 30 de mayo.- Abuelitas que ya no tienen el apoyo de sus hijos, por haberse quedado sin trabajo, están saliendo a las calles a vender para ganarse unos centavos y con ellos hacer frente a las necesidades que tienen en casa.
En las últimas semanas se ha podido observar en la zona céntrica de la ciudad personas laborando en el comercio informal ante la necesidad apremiante de obtener unos pocos pesos para el sustento de las familias.
Es el caso de los adultos mayores, quienes a pesar de ser uno de los sectores más vulnerables ante la pandemia, tienen que salir a vender, ya que ahora no tienen el apoyo de sus hijos, porque se quedaron sin trabajo.
Doña Carmen Campos Seca es una de las abuelitas que todos los días se le ve recorriendo la avenida principal y las calles de la ciudad, vendiendo frutas de la temporada.
Ella confió a este a este medio informativo que, a pesar de sus 86 años de edad y la posibilidad de que se contagie de COVID-19 su necesidad la obliga a salir, todos los días, a vender las frutas que cosecha en una parcela que tiene en esta comunidad.
La abuelita camina por las calles con su palangana de plástico, la cual llena de frutas de la temporada como ciruela, mamey, mango y aguacate, asimismo dijo que, a pesar de la difícil situación, la gente le ha comprado sus productos y con el ingreso que obtiene, ella compra su café, azúcar, frijol y otros productos de la canasta básica.
Doña Carmen Campos refirió que desde hace muchos años vive sola, y, agregó que, aunque sus hijos la apoyaban, ahora que se quedaron sin trabajo, aunque quisieran no pueden, con mayor razón ella tiene que salir todos los días a vender.
Otro abuelito al que se le ha visto vendiendo todos los días en la calle es don Jorge Briceño, él también vende frutas de la temporada en las calles de la ciudad.
Indicó que no le tienen miedo al coronavirus porque él come carne de víbora de cascabel.