Por Luis Enrique Cauich
KANTUNILKÍN, LÁZARO CÁRDENAS, 8 de mayo.- La lucha contra el dengue, que es transmitida por el mosco aedes aegipty, se complica por la pandemia del coronavirus, ya que por miedo o precaución, los habitantes de las localidades evitan dar permiso al personal de vectores para ingresar a sus patios para eliminar potenciales criaderos del zancudo.
El personal de vectores informó que se han triplicado los esfuerzos para poder cumplir con los objetivos de prevenir el dengue, zika y chikungunya, se han fumigado algunas localidades, pero hay zonas donde los filtros son difíciles de pasar y aún más las localidades donde no se les da el permiso para acceder a los patios.
Al ser del sector Salud y llevar los cubrebocas, se genera desconfianza en la familia, al grado que algunas han considerado que el personal de vectores está contaminado con el coronavirus y no se les permite acercarse a sus casas para hacer los trabajos de eliminación de criaderos de moscos o colocar el abate en los cuerpos o recipientes de almacenamiento de agua.
Los trabajadores dijeron comprender la situación y el miedo que tienen las familias de las localidades por el COVID-19, por lo que pidieron el apoyo de las familias de participar en la limpieza de sus predios y eliminación de recipientes que pudieran acumular agua de lluvia y generar un brote masivo de los moscos.
Comentaron que el dengue, también puede llegar a complicar la salud de los habitantes, por ello se busca que con las medidas preventivas el brote de moscos se reduzca en gran medida, pero se está complicando a causa de la pandemia, de modo que se tienen que buscar otras estrategias para que el municipio se mantenga un año más entre los municipios de menor incidencia de casos por dengue, puntualizaron.