
Los riesgos para niños y principalmente adolescentes en las redes sociales han crecido de manera exponencial en los últimos años, encendiendo las alertas de autoridades y expertos en ciberseguridad. En respuesta a esta creciente amenaza, la Policía Cibernética de Quintana Roo redobló esfuerzos para prevenir delitos digitales que afectan a menores de edad, informó la Secretaría de Seguridad Ciudadana.
Durante los meses de febrero y marzo de este año, la Policía Cibernética reportó al menos dos casos de robo de identidad a menores de edad a través del uso indebido de internet. Estas situaciones han puesto de manifiesto la urgente necesidad de fortalecer la cultura de la ciberseguridad desde edades tempranas.
Como parte de las acciones de prevención, el Gobierno del Estado, junto con diversas instancias, realizará el “Foro Identidad: Niñas y Niños Ciberseguros 2025”, un espacio dedicado a informar sobre los principales riesgos en el entorno digital y cómo proteger a la niñez y adolescencia en línea.
“Las redes sociales más comunes y utilizadas para comunicarse con menores actualmente son Facebook, Instagram y TikTok, pero esto varía constantemente, ya que los adolescentes siempre buscan la plataforma más popular del momento”, señaló personal de la Policía Cibernética.
Desde esta unidad se implementan campañas permanentes que se llevan directamente a las escuelas, abarcando desde nivel primaria hasta preparatoria. A través de pláticas informativas, se brindan herramientas a los estudiantes para que aprendan a cuidar su identidad digital, evitando caer en trampas.

Entre los peligros más recurrentes destaca el grooming, una práctica en la que adultos se hacen pasar por menores para ganarse la confianza de sus víctimas, muchas veces iniciando la conversación a través de juegos en línea o perfiles falsos en redes sociales. Una vez que logran establecer comunicación, utilizan el engaño o la amenaza para obtener información personal, imágenes o incluso ejercer algún tipo de extorsión.
“Lamentablemente, muchos menores pasan largas horas frente a una computadora, tablet o celular sin supervisión adulta. Esto los vuelve vulnerables a contactos con desconocidos que pueden ir desde el robo de identidad hasta delitos más graves como la trata de personas”, advirtió la dependencia.