Unos 800 habitantes de Donceles 28, en la supermanzana 64, avalaron la recuperación de un terreno de 2 mil 600 metros cuadrados en la prolongación de la avenida Chichén Itzá.
El proyecto contempla la creación de 43 cajones de estacionamiento, nuevas áreas verdes y aceras más amplias, en beneficio de más de mil vecinos del andador Mariano Matamoros y zonas cercanas.
Un grupo de colonos, expresaron recientemente su preocupación ante la posibilidad de que un predio ubicado en la prolongación de la avenida Chichén Itzá fuera destinado a uso privado.
En respuesta, autoridades municipales intervinieron para establecer acuerdos con desarrolladores, condicionando el avance del proyecto a medidas que prevengan afectaciones al entorno urbano.
Como parte de los compromisos asumidos, el plan contempla la construcción de una terraza elevada con el objetivo de mitigar posibles inundaciones en la zona. Además, se realizarán adecuaciones al sistema hidráulico para evitar sobrecargas en la red de drenaje, a fin de que la densidad del desarrollo no incremente el riesgo de colapsos.
El diseño también incorpora un paso peatonal que facilitará el tránsito entre la privada Mariano Matamoros y la escuela primaria Naciones Unidas. Este componente busca priorizar la movilidad de quienes caminan diariamente por esa ruta.
De acuerdo con un representante del colectivo Distrito Cancún, quien también reside en Donceles 28, el área experimentó una transformación gradual a raíz de modificaciones al uso de suelo, permitiendo mayor concentración de comercios y viviendas.
Noticia Destacada
Malecón Tajamar en Cancún, un ‘elefante blanco’; sigue incierta la inversión de mil 977 mdp
Esto generó el ingreso de inversión privada, asociada a intervenciones en espacios públicos. El terreno en cuestión es utilizado como estacionamiento informal, con capacidad para cerca de 20 vehículos, sin infraestructura ni condiciones óptimas.
El grupo responsable de la obra en el predio contiguo se hará cargo del acondicionamiento y mejoramiento del lugar, como parte de las obligaciones urbanas pactadas. El proyecto forma parte de la iniciativa “Hola Donceles”, que desde 2015 promueve la recuperación de esta área afectada históricamente por anegamientos.
En esta nueva etapa, se intervendrán 2 mil 600 metros cuadrados con reforestación del entorno, restauración de un humedal, la instalación de una cisterna para captación de agua pluvial, adecuaciones para accesibilidad universal y señalización de cruces seguros.
