
Una mujer cancunense, identificada como Kristel N. decidió romper el silencio y exponer públicamente que es víctima de ciberacoso sistemático a través de WhatsApp y redes sociales.
Dio a conocer que perfiles falsos utilizaron su información personal y fotografías para hostigarla, al difundir imágenes manipuladas y amenazarla a ella y a su familia.
“Quiero hacer público que estoy siendo víctima de acoso por parte de perfiles falsos. Por favor no le pongan me enoja para que no me bajen la publicación”, escribió en su perfil de Facebook, al difundir parte de la evidencia.
La víctima explicó que en un inicio los agresores le enviaban mensajes con videos sexuales desde números desconocidos.
Al bloquearlos, el acoso escaló: ahora recibe fotografías de su propio hogar e intimidación de violencia si no envía imágenes con contenido íntimo.
“Me escriben desde cuentas falsas, me mandan fotos de mi casa y hasta amenazan con hacerle daño a mi familia si no les mando fotos desnuda”, relató.
El caso tomó una dimensión aún más grave cuando comenzó a detectar el uso de inteligencia artificial para alterar sus imágenes.
“Han tomado fotos e historias de mi perfil de Instagram, las editan para que parezca que estoy desnuda ya sea en fotos o videos”, lamentó.
Añadió que la amenazan con publicarlas y enviarlas a sus amistades y familiares, por lo que pidió apoyo para que sus contactos reporten las cuentas que difundan ese material falso.
La agraviada aseguró que interpuso la denuncia correspondiente ante las autoridades y que la Policía Cibernética de Quintana Roo inició las primeras investigaciones.
“Esto ya se salió de control”, advirtió, tras señalar que el acoso habría iniciado cuando alguien compartió su número y fotos en un grupo de Telegram, lo que derivó en la ola de hostigamiento que enfrenta actualmente.
“No es fácil compartir esto, pero creo importante visibilizarlo porque nadie debería quedarse callado ante algo así”, destacó.
Hizo ver que cualquier amenaza contra su seguridad o la de su familia continuará denunciándose
En Quintana Roo, el uso de tecnologías digitales dio lugar no sólo a oportunidades, sino también a riesgos reales que escalan en cantidad e intensidad.
En 2025 hasta marzo, el C5 de la entidad informó 34 denuncias por delitos cibernéticos contra menores. Estos incluyen acoso (20 casos), sexting (siete), extorsión (cuatro), grooming (dos), amenazas (uno), así como difamación (uno).