Ronchas, escamación y una intensa comezón fueron los primeros síntomas que sufrió una vecina de la comunidad Chemuyil, identificada como Kandy, tras varios días de utilizar el suministro que distribuye la Comisión de Agua Potable y Alcantarillado (CAPA). Al acudir al médico, le diagnosticaron una infección bacteriana en la piel, presuntamente provocada por el contacto con agua contaminada.
“Yo solo me baño con esa agua, lavo mi ropa, los trastes… no tengo otra. Empezaron a salirme ronchas en la espalda, los brazos y el cuello. Fui al médico y me recetó antibióticos y pomadas porque era una infección, me dijo que era probable que fuera por el agua”, relató la afectada.
Noticia Destacada
“Toman fotos, se van y no regresan": Vecinos de Cancún señalan a Aguakan por no reparar fuga de agua desde hace dos años
La queja de Kandy ha destapado lo que decenas de habitantes de Chemuyil ya venían advirtiendo desde hace semanas: el agua llega sucia, con mal olor y, en algunos casos, con sedimentos visibles. Pese a las reiteradas quejas, CAPA no ha ofrecido ninguna respuesta ni solución.
“Sale amarilla, huele a caño y deja un polvito blanco cuando se seca. Esa agua no está bien, pero nos la cobran como si fuera limpia”, señaló.
Dijo que, en la comunidad, muchas familias han optado por comprar garrafones incluso para bañarse o lavar alimentos, lo que representa un gasto adicional que no todos pueden asumir. “No es justo, uno paga por un servicio que en vez de ayudarnos nos está enfermando”, agregó Kandy.
La situación ha sido una constante que la gente ya está harta del tema con CAPA, pese a eso, indicó que, aunque en reiteradas ocasiones levantan la voz, poco pasa, ya que ni la comisión o alguna autoridad de salubridad se hacen presente y dan solución al problema.
“No queremos comunicados ni promesas. Queremos agua limpia, segura. Esto ya no es una molestia, es un riesgo para nuestra salud”, expresó Kandy, quien dijo estar decidida a seguir denunciando hasta que la autoridad asuma su responsabilidad.
La CAPA en declaraciones anteriores había señalado que el agua de esta comunidad era buena para el uso diario y había descartado que las tuberías de la paraestatal fueran el problema, sin embargo, las quejas por esta situación están persistiendo.
Al cierre de esta edición, la dependencia no había emitido ninguna postura oficial sobre los reportes en Chemuyil, mientras la comunidad exige acciones concretas. La preocupación crece, al igual que los casos de personas con síntomas similares a los de Kandy.