TIHOLOP, Yaxcabá, Yuc., 10 de septiembre.- La delincuencia no pierde tiempo y busca los medios para hacer daño a las familias, y ahora lo más común es por medio de llamadas telefónicas.
Lo anterior viene al caso porque cuando el comisario ejidal de esta localidad viajaba con destino a Timul, recibió una llamada telefónica del número 9842339013, cuyo emisor le aseguró que su hija había sido secuestrada del colegio.
Visiblemente apesadumbrado, A.T.P. llegó a la población, muy nervioso y alterado ante tal información, pero luego de llamar a un contacto del colegio donde estudia su primogénita se dio cuenta de que había sido un susto.
El incidente causó revuelo entre los integrantes de la familia, que en llorando informaron de lo que aconteció, porque, según el principal afectado, en la llamada se le habló por su nombre. De igual forma a su hija se le mencionó por su nombre e incluso escuchó su sollozo.
Que esta noticia sirva para reflexionar que en un acontecimiento como éste se debe mantener la calma, buscar a las autoridades y esperar corroborar la veracidad de los hechos.
Además, Yucatán es un Estado con un contexto poco común en secuestros.
(POR ESTO! / Corresponsalías)