SUMA DE HIDALGO.– La Apícola Maya, que obligaba a los compradores privados a mejorar el precio a los apicultores, llamaba socios a los productores que firmaban los préstamos bancarios de hasta 36 millones de pesos para poder pagar la miel, entre otras irregularidades, por lo que pidieron a las autoridades investigar, castigar y reactivar la figura de Centro de Comercialización.
Camilo Poot Franco, Freddy Cortés Torres, José Luis Uicab Chan, Eustaquio Chib Pech, Juan Gabriel Cutz Balam y la hija de Francisco Echeverría Pool, Silvia Pool Basto, apicultores de este municipio, relataron ayer a POR ESTO! las irregularidades de la hoy saqueada Apícola Maya.
“Nos sorprendió ver que está saqueada la Apícola Maya, hasta dónde hemos llegado, aquí habemos fundadores, socios y ex trabajadores de la Apícola, queremos saber qué hará el Gobierno y si se quedará impune, porque hasta nos pedían firmar los préstamos para que la Apícola tuviera dinero para pagar la miel y hubo un tiempo que hasta nos llevaron a Hacienda para darnos de alta”, relataron los productores.
POR ESTO! ha publicado esta semana que las instalaciones de la Apícola Maya lucen saqueadas, totalmente desmanteladas y fuentes cercanas a la empresaria social han detallado que la empresa dejó de ser social, porque la sociedad la conformaban el presidente, así como sus cercanos, y señalaron a uno de los proyectistas al que se le debía dinero como el que desmanteló la planta, ubicada en Dzoyolá, Kanasin.
El Gobierno del Estado ha expresado, a través de la Dirección de Ganadería, que analizan el caso y la viabilidad del rescate.
Se ha informado que la Apícola Maya era la única empresa social del ramo, que estaba equipada y era reconocida a nivel internacional, pero por malos manejos de administración era rescatada por el Gobierno, hasta que dejó de operar en junio del 2016, derivado de la orden de embargo del SAT por la falta de pago de impuestos de años anteriores.
Ayer los apicultores relataron que la Apícola llamaba socios de la empresa a quienes firmaban los créditos por 30 mil pesos de cada apicultor, hasta juntar 36 millones, para que la Apícola tuviera dinero para pagarles la miel.
“No sabíamos”
“Sabíamos que estaba cerrada la Apícola, que había una orden de embargo, pero no que estaba saqueada, ya no hay activos y sabemos que entre la directiva se repartieron camionetas.
“El último evento de entrega de azúcar lo hicieron en el 2016 y todavía nos anunciaron lo del préstamo de 36 millones de pesos para que la empresa tuviera para pagarnos la miel, firmamos préstamos de 30 mil pesos cada uno, por eso nos llamaban socios, sin tener certificados de fundadores ni nada. Nos anunciaban el crédito, y a los que les vendíamos la miel nos daban a firmar las solicitudes de crédito por 30 mil pesos cada uno para que juntaran 36 millones y nos pagaran la miel, de eso ya no se vio nada. Ellos ya no pagaban luego luego la miel, tardaban un mes en pagar”, dijeron.
Recordaron que nunca se dieron remanentes, ni se anunciaron a quiénes se les daba de baja o las utilidades.
“No informaban nada, no decían nada de a dónde paraba el dinero que manejaban en dólares, y Lara Sosa se quedó de presidente muchos periodos, cuando sólo debía de estar 3 años. Acá en Suma había unos 30 socios, muchos fallecieron y a otros nunca les dieron su dinero por la venta de la planta en la Ciudad Industrial.
“A las asambleas nos llamaban para darnos los papeles para firmar los créditos y hubo una vez, cuando nos llevaron a Hacienda, les urgía tanto, que acá en la entrada del pueblo, con todo y su impresora, estaban en la calle para llenar papeles y hasta pagaban el día en 300 pesos para llevarnos al SAT, y hay gente a la que fastidiaron porque los cobradores andan tras ellos”, relataron.
Política
Comentaron que la Apícola se volvió la plataforma de políticos y hacían eventos “disfrazados de apicultura” para llevar a los políticos.
“Nunca hubo transparencia, ni cuentas claras, se volvió la plataforma política, hasta el presidente municipal de ahorita la llegó a usar. Lo cierto es que la Apícola balanceaba el precio para que los privados no mal pagaran, y desde que dejaron de comprar los privados pagan poco, ahorita andan en 25 a 26 pesos el kilo, cuando llegó a los 42 a 43 pesos en mayo”, dijeron.
Recordaron que los acopiadores ganaban 1.50 pesos por kilo de miel, así que del precio que daba la Apícola al productor, le pagaban 1.50 pesos menos.
“Acá en Suma el acopiador era el hijo de Perfecto Pool, el tesorero de la Apícola, y tenían registradas como 300 colmenas, pero activas muy pocas, era un secreto a voces todo lo que hacían, que se repartían entre ellos, y al apicultor le ponían pretexto de humedad de la miel para pagar menos. Con todo esto que ha pasado queremos saber qué hará el Gobierno, porque queremos que se recupere, que haya un centro de comercialización de los productores, pero transparente, porque acá se dice que hay 80 apicultores, pero en realidad no todos lo trabajan”.
Desinterés
Comentaron que ha habido desinterés de las autoridades por la apicultura, ya que sigue sin existir un método para controlar al escarabajo, no hay padrones, y ha habido una gran corrupción que hoy da muestras del abandono a la actividad.
La falta de interés del gobierno ha impulsado la proliferación de empresas compradoras y acopiadoras, como “la de los alemanas, Mayan Honey, ellos le compraban a la Apícola y, desde que cerraron, ellos abrieron 5 centros de acopio y hoy son los más grandes”, dijeron los apicultores.
Otros son “Miel Gabriela”, “Miel Mex” y “Mi Miel”. Y hay una tendencia por la miel orgánica que no baja de 50 pesos por kilo, pero debe ser certificada.
“Nosotros ya nos cansamos, la abeja no, pero se va a cansar y se va a ir, no ha habido interés en las abejas, en el apicultor”, dijeron.
POR ESTO! visitó la casa del tesorero de la Apícola Maya, Perfecto Pool Chi, para entrevistarlo, pero su familia comentó que había viajado a Mérida para ver temas de la Apícola.
(Verónica Martínez)