PROGRESO, Yucatán, 30 de enero.- En la evolución portuaria de Yucatán se impuso esta costa para el puerto de altura y cabotaje que se proyectaba por estar más cerca de la capital del Estado y de las haciendas productoras de henequén.
Desde 1810, Sisal venía operando como el puerto importador y exportador del Estado, ya que estaba en la curva de la península hacia el Estado de Campeche, pero como era yucateco, se le vieron condiciones para los planes comerciales de crecimiento que urgía entonces antes del año ya mencionado; se puede decir que Yucatán le prestaba su puerto a Campeche para el embarque de sus productos pero con el tiempo hubo problemas y entonces nuestro Estado decidió tener su puerto para sus planes y en 1810 abrió Sisal después de un estudio, pero en realidad no resultó práctico por no estar en el sitio adecuado y además sus condiciones por falta de un camino adecuado y por estar sometido a los efectos del pantano.
Un hombre laborioso e inteligente y culto, dedicado a la empresa, se prestó a localizar el sitio adecuado cerca de Mérida y de las haciendas, y prometedor para abrir el nuevo puerto, y después de un trabajo desde 1840 ubicó el mejor sitio que fue precisamente este lugar a 34 kilómetros a la recta de Mérida; prácticos españoles muy expertos expresaron que, efectivamente, este punto era el indicado no obstante algunas de sus condiciones eran iguales a la de Sisal, pero en otras llevaba ventaja, pues a Progreso, como se le llamó a este ranchito, podía hacerse un traslado en sólo una hora venciendo la garganta de la llamada ciénaga y en cambio a Sisal las carretas transportadoras tardaban hasta un día cuando crecía la ciénaga y después de 30 años de trabajos intensos en el estudio, se consiguió aquí el puerto de altura inaugurado en 1871.
El mal tiempo y las medidas preventivas
En la actualidad se toman muchas medidas preventivas cuando se difunden los boletines meteorológicos de que se acerca un disturbio que se originó en el norte y se dirige al golfo de México amenazando nuestras costas incluyendo el puerto de Progreso.
Antes casi no se sabía nada de esto, por los pocos informes que llegaban a este lugar, y cuando la capitanía de puerto y los prácticos por sus conocimientos captaban que era inminente que abrazara nuestra costa un norte fuerte, violento o un huracán, ponían una bandera negra a un lado de la carroza del muelle fiscal para que los marinos y el pueblo tomasen precauciones y se cuidasen principalmente los marinos del posible azote que haría el fenómeno a nuestras costas.
Claro que las familias se resguardaban en sus propios domicilios, y los comercios y todo lo que necesitaba prevenirse lo único que hacían era cerrar puertas y evitar que las propiedades quedasen expuestas al ataque de las furias atmosféricas.
Para los marinos pescadores lo único que podía hacer por falta de refugios, sobre todo los dueños de veleros, balandros y viveritos que era su único equipo de trabajo, fondearlos y amarrarlos bien con sus anclitas frente a la parte poniente del puerto y cuando los vientos comenzaban a causar daños, los pescadores y sus familias muriéndose de frío y exponiéndose se amontonaban en la playa a ver únicamente cómo sus barquitos soltaban su ancla con la fuerza del meteoro, chocaban unos con otros, se hundían o se estrellaban en la playa quedándose el sector pesquero casi sin elementos. Así fueron esas épocas tan terribles, pero hoy es distinto con los puertos de abrigo, con informes de prevención en todo momento.
Hasta en las carreras y profesiones debemos avanzar
Lo que está de moda en estos tiempos, en el terreno profesional, es avanzar también en la creatividad muy necesaria de tener los elementos para el progreso de acuerdo con la época; en Yucatán observamos, principalmente, cómo se avanza en la educación profesional general, se enseña y se prepara, se da pasos largos para que no nos detengamos.
Y es una satisfacción muy grande ver cómo aumentan las universidades con nuevas carreras profesionales, de acuerdo con las tecnologías del momento; aquí, en Progreso, fue una gran satisfacción que se abriese hace 18 años, en la época de Cervera Pacheco, el Instituto Tecnológico Superior de Progreso y así se iniciaron también los tiempos en que aquí sin necesidad de salir de Progreso, los jóvenes sin que sus padres gasten, podían obtener un título profesional en el campo de la tecnología. Sin embargo, los jóvenes desde la secundaria ya eran capacitados en las técnicas de la pesca, en la Escuela Secundaria Pesquera que funciona en el puerto de abrigo.
Pero hay que decirlo sin titubeo además de las 6 capacidades tecnológicas en que se inició el ITSP y siguen con las mismas, es necesario y urgente que se añadan unas 2 ó 3 más relacionadas con la naturaleza que envuelven esos lugares como el mar, la navegación, la pesca, el comercio, turismo, ambiente, costumbres y otros oficios, y de estos proyectos que se hagan realidad más jóvenes de Progreso se incorporarían al Tecnológico local por las opciones para escoger.
El pueblo necesita leer
Todos los que están enterados de los planes y proyectos de los nuevos gobiernos saben de una gran cantidad de propuestas para lo más importante de nuestras necesidades que son el trabajo, la alimentación y la cultura.
Y se sabe así mismo que la mayoría son proyectos que los gobiernos hacen revolotear en su inteligencia porque conviene en estos tiempos a la cultura en general.
Sin embargo aunque está en sus ideas la literatura, todos sabemos que uno de los proyectos ya se anticipó y que es el campo editorial.
Pues como se observa, en estos momentos estamos viviendo ya muy provechoso que es el de la literatura, pues nunca como ahora se viene trabajando desde hace algún tiempo en ese campo, con la edición de libros y eventos con la palabra y la comunicación, y hace algún tiempo se viene trabajando más bien por iniciativa en el campo de la cultura, en la edición de libros que para el entendimiento del pueblo se necesita leer y esto es una riqueza verdadera en un mar de libros que es uno de los mejores avances que tenemos ya.
Fantásticos cenotes
¿Quieres asombrarte como nunca antes? Visita los cenotes de Yucatán. ¿Buscas vivir una experiencia que despierte tus sentidos y anime tu espíritu? Nada en un cenote… o en varios. Hay más de 16 por visitar en la comunidad de Homún; recorrí 12 de ellos, cada uno con una belleza que te impacta, ya sea por la manera en la que se ilumina el agua con la luz natural, su profundidad (algunos a más de 10-12 metros bajo tierra), las caprichosas formaciones de sus paredes con estalactitas aún formándose o las aves y peces que ahí habitan.
Ubicado dentro de la zona conocida como Anillo de Cenotes, a tan sólo 1 hora de Mérida, Homún ha desarrollado su vocación turística aprovechando su gran cantidad y variedad de cenotes y grutas. Cuenta con más de 285 guías certificados, sitios de mototaxis (ubicados junto a la iglesia, en el parque y en la entrada desde Acanceh), paradores turísticos con servicios (chalecos, vestidores, baños, mesas de picnic), restaurantes, cabañas y hoteles. La iglesia y ex convento colonial dedicado a San Buenaventura complementan la visita.
Puedes recorrer los cenotes en familia, con amigos o en pareja; particularmente los niños disfrutan mucho conocer la naturaleza, ver mariposas en el camino, flotar en un cenote. Al llegar, contrata a un guía local, te llevará en mototaxi (4 personas máximo) a visitar de 3 a 4 cenotes por 250 pesos durante 3 horas aproximadamente, ya sea que tengas alguno en mente o que le pidas recomendaciones según tu nivel de aventura. Todos abren de 9 a.m. a 5 p.m. y la cuota de acceso en cada uno es de 30 pesos por persona durante el tiempo que desees quedarte. Recuerda no usar bloqueador, bronceador o repelente. Puedes rentar salvavidas o accesorios de buceo.
Si eres de emociones tranquilas, visita Tza Ujun Kat, el color verde transparente de sus aguas te impactará, no querrás salir de ese paraíso refrescante. Experimenta la guarida de las golondrinas en Hool Kosom, y comprueba que donde hay un álamo seguro hay un cenote, como en Balmil. Despierta tu lado místico tratando de encontrar figuras en las formaciones de piedra o en los jarrones en el fondo del cenote Chulul.
Para los más arriesgados que aman tirarse de una liana o “soga de Tarzán”, en Canunchén o en alguno de los cenotes Los Tres Oches podrán hacerlo. Volvería a descender más de 7 metros para un clavado en el cenote Ch’el P’aak, de mis favoritos. Siente el calor de la tierra en las grutas y cenote La Candelaria, un temazcal natural.
El parador Yaxbacaltún cuenta con un cenote abierto de vista espectacular, además, zoológico, hamacas, rappel y restaurante. Para niños o personas que no saben nadar, el cenote del parador Santa Cruz es ideal. También hay tirolesa, temazcal y sirven deliciosos platillos regionales. El cenote del Parador San Antonio está abierto las 24 horas (previo aviso), y puedes practicar kayak y exfoliarte con la arena de su fondo. El parque ecoturístico Santa Rosa ofrece un cenote iluminado, tienda de artesanías y mucho más.
Libros de segunda mano a tu alcance
¿Qué pasaría si tuvieras la oportunidad de vivir mil vidas? ¿De viajar a lugares inimaginables? ¿De conocer a grandes pensadores? Y todo esto, de forma muy accesible… ¿La tomarías?
Los libros son como puertos que te llevan a otros mundos, a conocer lugares exóticos, aprender acerca de cultoras lejanas o escuchar opiniones diferentes. ¿Te atreverías a iniciarte en la lectura?
El libro que me atrapó a mí fue “El Sabueso de los Baskenville”, de Sir Arthur Conan Doyle. Después de maravillarme ante la intrigante personalidad del detective Sherlock Holmes, supe que no podía dejar de experimentar la sensación de haber leído un buen libro.
Lamentablemente no resulta ser un pasatiempo barato; sin embargo, en Mérida existen algunos lugares que nos ofrecen gran cantidad de libros de segunda mano a precios verdaderamente accesibles.
En “Casa Tino, Libros y Muebles Usados”, encontrarás una gran cantidad, desde libros de medicina y derecho hasta autores populares como Ken Follett, John Ketzenbach, Isabel Allende y clásicos como Dante Alighieri, Edgar Allan Poe y Gabriel García Márquez. Esta mina de oro literaria está en la Calle 65 por 62 y 64 del Centro de Mérida.
En la calle 64 x 55 y 57 encontrarás un establecimiento (sin nombre) que vende toda clase de libros. Ahí podrás encontrar autores como Danielle Steel, Paulo Coelho, además de libros de texto, y podrás tener acceso a ellos a un precio verdaderamente bajo. Si no los encuentras abiertos, cada domingo en el Parque de Santa Lucía exponen sus títulos para quienes deseen encontrar un buen compañero.
De forma adicional, todos los sábados en la calle 59 x 62 y 64, de 8 a.m. a 3 p.m. se instala un pequeño puesto en el que podrás encontrar gran variedad de títulos. Al igual, en el mercado Lucas de Gálvez, también existe la posibilidad de encontrar libros con excelentes historias. Encuentra este pequeño local en el área de las especias, en el corazón del mercado.
Ahora ya lo sabes, ya no hay excusa para no iniciarte en hábito de la lectura. Atrévete a descubrir nuevos mundos, nuevos amigos y emocionantes aventuras. Aprende de los grandes autores del pasado y de los más contemporáneos, disfruta conociendo palabras nuevas y mejorando tu ortografía… pero más que nada, atrévete a disfrutar de la sensación de haber leído un buen libro.
Tras bambalinas
Yucatán tiene vocación artística nata: lo demuestran los talentosos músicos, compositores y escritores que han surgido de esta tierra. Mención especial merecen los creadores de obras teatrales que ponen la mirada en las realidades que transcurren cotidianamente y luego las convierten en historias y personajes que trascienden los escenarios y las fronteras. Varias autoras y actrices son mujeres orgullosas de sus raíces yucatecas que se han inspirado en vivencias propias, testimonios, entrevistas y un trabajo de observación en las comunidades para plasmar una propuesta escénica que pone a Mérida como un epicentro creador de teatro.
Raquel Araujo Madera, originaria de Ticul, es fundadora y directora artística del Teatro de la Rendija, un espacio para producciones y artistas locales e invitados que ha impulsado las artes escénicas. Con una inclinación natural por recuperar y mantener vigente los textos de Sor Juana Inés de la Cruz, como una visión femenina de lo que ocurre en la actualidad, ha montado “Amor es Más Laberinto” en coproducción con la Compañía Nacional de Teatro. Teatro de la Rendija
Calle 50 No. 466 x 51, Centro. Cel. 9993291313. www.teatrodelarendija.com
Conchi León, actriz dramaturga y directora, fundó la compañía de teatro Sa’as Tun (piedra de luz). Ha incorporado en sus obras problemáticas sociales como la violencia hacia las mujeres, rituales como el Hetzmek, entre otros. “Mestiza Power”, obra emblemática estrenada en 2005, en proyecto para llevarla al cine, es referente en la escena teatral contemporánea por su humor y reflexión. “Las mestizas tienen poesía, política, amor, fuerza y belleza en una sola frase”, recalcó Conchi al recibir en agosto pasado la medalla de honor Héctor Herrera “Cholo” por su labor como dramaturga, actriz e impulsora del teatro yucateco. Integrante del Sistema Nacional de Creadores desde 2018, Conchi ha llevado Yucatán al mundo a través de sus personajes y ambientación.
Salomé Sansores, mejor conocida como Chepita Kakatúa de la Papaya Fresca de Umán, es una de las favoritas como personaje regional. Es positiva y nunca insulta. Combina lo moderno sin dejar a un lado las creencias y costumbres de su pueblo. Cree que para hacer sus sueños realidad uno debe despeinarse. “¿Estás estresado? Deshierba tu patio. No puedo dormir, ¡ve fijamente el ventilador!”. Inspirada en las mujeres y los niños, la responsabilidad social y el amor, Salomé ha llevado los monólogos de este personaje en giras en las comunidades, en otras ciudades e internacionalmente.
(F.R.B.)