TIZIMIN, Yucatán, 11 de noviembre.- Integrantes de la asociación de rescate de perros callejeros denominada “La Manada”, recibieron el reporte de un caso de maltrato de un animal al que le habían costurado tres botones con hilera en la oreja izquierda, por lo que acudieron en su ayuda y ahora lo atiende uno de sus veterinarios.
Compartieron que lo ubicaron en la colonia “San José Nabalam” y se trataba de un caso más de maltrato hacia los canes de la calle.
Sin embargo, se está averiguando ya que algunas personas indican que se trata de una cirugía y un tratamiento primitivo y malhecho al que se sometió a este animalito para que cicatrice.
Lo llevaron con su veterinario y tras diagnosticarlo se constató que la oreja del perro se infectó por esta práctica poco convencional, provocándole una hemorragia interna que dio pauta a que se le esté pudriendo.
Inmediatamente se procedió a su curación, se le retiraron los botones y se continúa su atención y tratamiento encontrándose estable.
Ahora se está averiguando si tiene un posible dueño que reclame a su mascota y explique lo que aconteció o en su caso están viendo quehacer con él ya que la población de animales rescatados es números. A duras penas les alcanza para darles atención y no tienen donde poner al can.
También aprovecharon solicitar el apoyo de la sociedad para continuar con esta labor en favor de estos animales, ya que resulta muy costosa, exhortándolos a que donen a esta agrupación recursos monetarios para comprar vincrifina, tratamiento para el cáncer en los animales para el TVT (es una solución inyectable), para adquirir croquetas, medicamentos para perros que no estén caducos, jeringas, collares isabelinos, camitas, colchoncitos, cadenas para pasearlos y lo que deseen aportar para las mascotas o en especie, indicando que será significativa su aportación, pues será de gran valor y útil para la alimentación, cuidados y sobre todo para la salud de los perritos que se hospedan en su albergue. Para tal fin indicaron que deben comunicarse con “La Manada” en las redes sociales.
(Texto y foto: Luis Manuel Pech Sánchez)