Cuatro canes de compañía causaron sensación ayer por la mañana en el Aeropuerto Internacional de Mérida, ejemplares que llegaron de Monterrey con destino a Orlando, Florida.
Un dóberman de apenas tres años de edad, propiedad de Tania N., y tres labradores, de la misma edad, los cuatro de color negro, llamaron la atención de los usuarios, no sólo por su tamaño, sino por el grado de docilidad y obediencia.
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Tania, la única que hablaba español, explicó que apenas tiene un año de estar conviviendo con Baskin, con el que se siente muy segura y tranquila donde quiera que va, porque además de obediente, muestra un buen comportamiento, prueba de esto es que tanto él como los otros labradores se mostraron muy tranquilos durante su corto paso por la terminal de Mérida.
Tania viajó a Orlando, Florida, donde estarán hasta el viernes antes de regresar a Monterrey.
El dóberman, explico, es una raza de perro de origen germano que debe su nombre a Karl Friedrich Louis Dobermann, un alemán que a finales del siglo XIX toma la iniciativa de crear una nueva raza de perro, que sirviera eficazmente a su difícil trabajo como recaudador de impuestos.
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Para conseguir el nacimiento de esta nueva raza, cruzó otras razas caninas como el Rottweiler, el Beauceron, el Weimaraner, el Manchester Terrier o el Pinscher, entre otros.
Actualmente, sus principales funciones son: perro policía, perro militar, perro de defensa y seguridad, perro guardián y de acompañamiento emocional, como en este caso.
