
El Aeropuerto Internacional de Mérida mantiene distintas restricciones, principalmente en temas de conductores que se estacionan en áreas de ascenso y descenso, a quienes se le aplican multas por bloquear el tránsito.
La Guardia Nacional mantiene la vigilancia en la terminal aérea, logrando retirar a conductores que se estacionan en la zona de accesos para esperar a pasajeros que llegan a Mérida.
Sin embargo, en vez de pagar $52.00 pesos del estacionamiento, prefieren quedarse en la zona de accesos de ascenso y descenso, provocando largas filas de autos, principalmente en horas pico.
Por ello, con el fin de evitar recibir multas, a los pasajeros del aeropuerto de Mérida se les ha recomendado no mantenerse estacionados en este sitio y mantener el flujo vehicular.
De lo contrario, la Guardia Nacional puede otorgar multas a los conductores, las cuales pueden ascender hasta los $6,000.00 pesos.
Además de los conductores particulares, los elementos de la GN se encargan de detectar a los operadores de taxi de plataformas digitales, que sabiendo que no están autorizados para operar en esa zona, tratan de burlar la vigilancia y acuden a recoger pasajeros a la terminal, arguyendo varios pretextos, por ejemplo, que las personas que se suben a las unidades son sus amigos o familiares, pero al final reconocen su error y reciben fuertes multas, y en ocasiones hasta la detención de las unidades en el corralón.
Sin embargo, este tipo de anomalías se han convertido en un cuento de nunca acabar y a diario se puede constatar cómo la fila de vehículos abarca desde la entrada principal hasta casi la mitad o más de la vialidad de salida de la terminal aérea, más de 400 metros, esto entre las 13:00 y las 15:00 horas.