Un can del Ejército, entrenado para detectar explosivos, detectó más de 30 kilos de pirotecnia que estaban ocultos en tres maletas, en la cajuela de un autobús de pasajeros procedente de Acayucan, Veracruz, con destino a Mérida, Yucatán; los explosivos fueron asegurados y puestos a disposición de las autoridades competentes.
El aseguramiento se registró ayer sábado, alrededor de las 7:30 de la mañana, en el Puesto de Seguridad Militar establecido a la altura de la caseta fitosanitaria de Halachó, entre los límites de Yucatán y Campeche, donde se encuentra el personal militar perteneciente al 11/o. Batallón de Infantería, comandado por el Teniente Coronel de Infantería del Estado Mayor César Amaya Becerra.
En el Puesto de Seguridad los militares revisaron el maletero del autobús, de color rojo, marca Mercedes Benz, de la empresa Autobuses de Oriente, con número económico 0845 y placas 59-HA-7J del Servicio Público Federal, procedente de Acayucan, Veracruz, y con destino a Mérida, Yucatán.
La revisión fue con apoyo de un binomio canino, el perro efectuó un marcaje en tres maletas, una de color negro, otra negra con rojo y la tercera fiusha; ante el señalamiento los soldados procedieron a realizar una inspección minuciosa, descubriendo en el interior de las maletas diversos “artificios pirotécnicos, con un peso de poco más de 32 kilos, rebasando por mucho los 10 kilos autorizados por la Ley General de Armas de Fuego y Explosivos”.
Los militares solicitaron a la Secretaría de Seguridad Pública que fungiera como el Primer Respondiente para poner los artificios pirotécnicos asegurados a disposición de la Procuraduría General de la República.
(Fernando Poó Hurtado)