Caos vial en Mérida, horas antes del inicio de la inauguración del Festival Internacional de la Trova.
Ayer, entre las 7:30 y las 8:15 horas, a pesar del operativo de vialidad que tiene el objetivo de garantizar la movilidad segura de automovilistas y peatones, y de dar la mayor fluidez posible al tránsito vehicular en la zona del Paseo Montejo por avenida Pérez Ponce y el Canal 13, ante el cierre de calles se generó un enorme caos que enojó a los conductores que estuvieron circulando por esa zona, ya que la fluidez vehicular era extremadamente lenta, desde la Pérez Ponce a la altura de la calle 29 de la ciudad, donde inicia el primer cierre de calles, hasta la 56.
Los conductores no avanzaban ni media cuadra cuando se formaba otro cuello de botella, que generó un concierto de claxonazos y una que otra mentada de madre, ante esta situación se estuvieron recibiendo reportes al periódico a través de las redes sociales y de llamadas telefónicas preguntando a quién se le ocurrió semejante disparate de cerrar desde horas antes de la inauguración del festival las calles.
Aunque los medios impresos ya habían dado a conocer con anticipación el cierre de las arterias vehiculares, el evento dejó un mal sabor de boca a los conductores que estuvieron obligados a circular por esos rumbos.
No fue hasta que los alumnos de las escuelas cercanas entraron a los planteles y los empleados y trabajadores iniciaron las labores que el tránsito fluyó sin mayores contratiempos.
En la intersección del Paseo de Montejo y la avenida Pérez Ponce se instalaron varias carpas y equipos de sonido que fueron trasladados en camiones y vehículos pesados, cuyos conductores tuvieron que realizar varias maniobras para descargar los equipos.
Las maniobras fueron dirigidas por agentes de vialidad de la Secretaría de Seguridad Píblica y duraban unos cuantos minutos, pero los automovilistas, desesperados por las prisas para no llegar tarde a sus trabajos, hacían sonar los cláxones persistentemente.
Es importante destacar que había letreros que indicaban las rutas alternas que además estaban señalizadas con conos anaranjados y un número considerable de policías a pie y moto-patrulleros de la SSP, quienes dirigieron la vialidad y recorrieron constantemente la zona para evitar que los conductores se estacionaran en lugares prohibidos.
(Luis Tamayo / Fernando Poó)
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