Mientras los alumnos de preparatoria del “Colegio San Agustín” realizaban un evento con motivo del Hanal Pixán, una compañera de los jóvenes estaba sufriendo un aborto involuntario, en uno de los baños del citado centro escolar.
Cuando las autoridades educativas del plantel particular tuvieron conocimiento del hecho, procedieron a dar por finalizado el evento y retiraron a todo el alumnado, sin dar explicación alguna.
Mientras, las autoridades educativas dieron parte a la policía, por lo que al sitio arribaron unidades de la Policía Municipal de Mérida (PMM), así como paramédicos de la misma corporación policíaca, que atendieron a la joven de 17 años de edad.
Tras brindarle los primeros auxilios, los paramédicos de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) trasladaron a la adolescente, a bordo de la ambulancia Y-21, al Hospital Benito Juárez del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), para su atención médica.
Al colegio, ubicado sobre la calle 58 entre 57 y 59 del Centro de la ciudad, llegó personal de la Policía Estatal Investigadora (PEI), que se encargó de realizar las entrevistas a quienes supieron del lamentable hecho.
Más tarde arribó personal del Servicio Médico Forense y un elemento femenino del Semefo se encargó de sacar dentro de una bolsa negra el bebé prematuro, que lamentablemente no sobrevivió, para trasladarlo a la morgue de la Fiscalía para los trámites correspondientes.
(Luis Tamayo Mendicuti)