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Campeche

De la erosión, NO hay más culpable que las autoridades

Las autoridades competentes de los tres niveles de Gobierno han sido las responsables por décadas de los problemas ambientales que han ocasionado el abandono y el anclaje de cuatro barcos de la empresa Oceanografía en la costa Norte de la Isla.

Lourdes Rodríguez Badillo, representante legal de Marea Azul A.C., sostuvo que el anclar los barcos al lecho marino fue parte vital del problema de erosión que ya estaba en proceso por causas naturales.

“Vamos a recordar el origen de esto, acuérdate que había más de 70 barcos con anclas rompiendo el lecho marino frente al malecón y argumentaban que los barcos siempre se habían anclado ahí. Pero cuando estaba la flota camaronera carmelita amarraban los barcos a unos muelles que había de madera, los quitaron cuando hicieron el malecón pero no se usaban anclas”.

Un chalán, por ejemplo, una remolcadora, tienen cuatro anclas, estaban destruyendo; ahí que es el principio de donde empieza el alimento de los delfines, sostuvo Rodríguez Badillo.

“La sociedad civil se movilizó y se logró que las autoridades hicieran las gestiones para que esos barcos fueran colocados en donde deben de ir y no por una cuestión de comodidad o corrupción estuvieran ahí”.

Problema añejo

En su carácter de activista ambiental, Rodríguez Badillo indicó que el problema lo empezó Oceanografía desde antes que fuera incautada por el Sistema de Administración Tributaria (SAT) cuando anclaban sus navíos frente al malecón del Centro.

“Cuando se exigió la salida de esos barcos, de una manera irresponsable Oceanografía permitió que cinco barcos quedaran a la deriva y encallaron, uno se hundió con todo y combustible debido al saqueo. Pero eso ocurrió porque estuvieron desmantelándolo y de repente entró agua donde estaban cortando para robarse el metal del casco”.

Todo ese asbesto, toda esa contaminación ahí terminó, dentro del Área Natural Protegida. Después otros cuatro barcos quedaron a la deriva y estos son los que han venido causando un problema de erosión, acelerando el proceso que ya existe por cambio climático, aseveró la entrevistada.

“Los barcos en algunos lugares como atrás de Tierra y Libertad con el ‘Caballo de Trabajo’ aceleraron eso y causaron un impacto severo a la línea costera, a toda la duna, se metieron prácticamente hasta el camino y si bien veo que hay la voluntad porque esos barcos se muevan incluso ya había una orden de que salieran de ahí, todo es como muy lento, como si no conociéramos o no estuviéramos acostumbrados a que las leyes se tienen que cumplir”.

Las leyes sobre el papel no sirven para nada y cuando hay una situación de estas dimensiones donde ya se están comiendo una vía de comunicación importante, justamente donde se pretende que sea la continuación del malecón costero, no hay por dónde.

“En principio había trabajadores en los barcos pero eran víctimas de piratas, los encerraban en camarotes para robarles, entonces ha sido un proceso muy largo, yo creo que es una radiografía de lo lento que actuamos ante un caso desconocido en Carmen, eso no ocurría porque los barcos se amarraban a los muelles”.

Antes no había esta cantidad de personas con intenciones oscuras sólo de ganar dinero y sin ningún respeto por una Isla que les ha dado tanto, donde los han recibido y han hecho grandes fortunas. “Finalmente la irresponsabilidad con la que se manejó este tema de los barcos como lo hacía sí deja claro que no estamos preparados para manejar este tipo de contingencias”, concluyó Rodríguez Badillo.

(Texto: POR ESTO! /

Fotos: Ignacio Morales)

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