CHAMPOTON, Campeche.- La desilusión imperó entre pescadores durante el segundo día de la temporada de captura de pulpo; la mayoría de ellos prefirieron no salir a capturar la especie de forma tradicional -al garete-, luego de que ninguna autoridad impidiera que cientos de buzos con ganchos y otras artes de pesca prohibidas arrasaran con todo el molusco octópodo que encontraron a su paso, sin importar talla y peso.
En este puerto, pese al precio por kilogramo que varió de 45 a 55 pesos entre permisionarios y “coyotes”, decenas de hombres de mar que prepararon sus lanchas para pescar el pulpo en forma tradicional declinaron este martes salir al mar.
Su argumento más sólido fue que durante el primer día sus lanchas se vieron rodeadas de buzos, quienes con ganchos barrieron con todo el pulpo que encontraron a su paso, sin importarles talla y peso.
“Mientras nosotros estábamos detenidos por la calma, ellos en el fondo capturaban todo el pulpo que topaban, obviamente para nosotros no es negocio esto”, dijo el pescador, Ceferino Acosta Chan.
Nadie impide depredación
Por otro lado, este martes cientos de buzos en grupos de hasta 10 de ellos salieron al mar a bordo de lanchas, para capturar el molusco.
Ni la Capitanía de Puerto, ni la Armada de México, mucho menos personal de la Comisión Nacional de Acuacultura y Pesca impidió que estas embarcaciones sobrecargadas de peso, y con el evidente riesgo por su masiva tripulación, se hicieran a la mar.
De acuerdo a cálculos conservadores, cada lancha con buzos está entregando a “coyotes” entre 200 y 250 kilogramos de pulpo capturado con ganchos y otras artes de pesca prohibidas.
(Texto y fotos: Alejandro Landeros)