
La cifra de suicidios en el estado es alarmante, y la estrategia implementada por el sector salud no ha funcionado, recriminaron diputados locales del Congreso del Estado, quienes urgieron a la Secretaría de Salud (Ssa) a reforzar la atención a la salud mental, al considerar preocupante el creciente número de menores que deciden quitarse la vida.
Ante los más de 60 suicidios registrados en lo que va de 2025 —un promedio de dos casos por semana—, el coordinador parlamentario del PRI, Miguel Ángel Pool Alpuche, sentenció que se trata de un problema que no distingue colores ni ideologías partidistas.
“Si ya nos dimos cuenta de que la estrategia no está funcionando, debemos reforzarla o cambiarla. No podemos mantener la misma fórmula cuando cada año Campeche aparece en las estadísticas nacionales”, lamentó, al añadir que es necesario legislar en materia de prevención del suicidio.
También reprochó que la Mesa de Salud de la actual legislatura, que debía atender problemáticas prioritarias como el suicidio y el cáncer, sigue sin instalarse desde abril, lo que refleja una falta de voluntad política para abordar esta crisis de salud pública.
En el mismo sentido, el coordinador parlamentario de Movimiento Ciudadano, Pedro Armentía López, sostuvo que la SSA ha sido omisa al no definir una estrategia clara para la atención de la salud mental y la prevención del suicidio.
Recordó que en el Congreso se han presentado iniciativas relacionadas con acompañamiento psicológico y programas de seguimiento, sin que hasta ahora se hayan concretado.
“Históricamente, Campeche ha tenido altos índices de suicidios, pero hoy es más preocupante porque se ha incrementado entre menores de edad. Los factores van desde la incertidumbre laboral, adicciones y conflictos familiares, hasta la falta de atención médica especializada”, advirtió.
Por ello, manifestó que no basta con señalar el problema, sino que se requiere presupuesto, campañas sólidas y acompañamiento real, para que las y los jóvenes encuentren esperanza y oportunidades.
Ambos legisladores coincidieron en que el combate al suicidio requiere un esfuerzo conjunto entre el Estado, las instituciones y la sociedad, con medidas que prioricen la prevención, la atención psicológica y el fortalecimiento de los programas de salud mental.