PUEBLA, Puebla, 26 de abril (NTX).- En partido que terminó “calientito”, con intercambio de palabras e insultos entre los técnicos, el equipo del Puebla se complicó sus posibilidades de Liguilla pese a que vino de atrás para rescatar el empate 1-1 ante los Tigres de la UANL, en duelo que abrió la actividad de la fecha 16 del Torneo Clausura 2019 de la Liga MX.
Vladimir Loroña en propia meta adelantó a los norteños al minuto tres, mientras que el argentino Gustavo Matías Alustiza logró la paridad al 61.
Con este resultado, los de “La Franja” llegaron a 24 unidades de manera momentánea en zona de Liguilla, en espera de otros resultados, en tanto que sumaron 34 puntos en el subliderato.
Luego del triunfo que logró la semana anterior ante Guadalajara, los de la “Angelopolis” necesitaban un resultado similar, pero ante un rival mucho más exigente que bien pudo haber definido el juego en el primer cuarto de hora, pero su falta de certeza solo le alcanzó para tomar una mínima ventaja.
El cuadro de la “Sultana del Norte” logró adelantarse en el marcador apenas al minuto tres en un centro por derecha de Jurgen Damm a segundo poste, donde Vladimir Loroña sin presión alguna en su afán de despejar, pecó de exceso de confianza, y le pegó mal al balón para meterla en propia meta.
La anotación le permitió a la visita apropiarse por completo del juego, y cerca estuvo de la segunda anotación en un disparo de Javier Aquino que pegó en el poste, el rebote le quedó al francés André-Pirre-Gignac que sin portero la voló.
Los “Camoteros” reaccionaron hasta el minuto 18 en una gran pared entre el argentino Gustavo Matías Alustiza y el colombiano Brayan Angulo, quien cedió por derecha a Francisco Javier Acuña, que de frente perdió un tiempo para definir, lo que le permitió a Jorge Torres Nilo tapar el disparo del “Messi”.
Antes del descanso, los Tigres tuvieron la segunda anotación en un disparo del chileno Eduardo Vargas que reventó la base de poste derecho, para irse así a los vestidores.
Los poblanos no se quedaron atrás y Alustiza con un “taconazo” espectacular, puso el esférico en la base del poste izquierdo cuando Nahuel parecía ya vencido, y así firmar un empate a “sangre fuego”.