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Que la gobernanza no sirva más para ocultar intereses especulativos en la gestión pública, un reto para AMLO y MORENA

Antropólogo Jorge Franco Cáceres  

Introducción

Nos preguntamos por qué no se somete a debate público si la creciente agilidad con que sucede la transnacionalización mercantil en las áreas estratégicas y las zonas vulnerables, es decir, el modo exprés como se mueven diversas masas de capitales transnacionales en las regiones patrimoniales de México, debe mantenerse a costa: 1) del debilitamiento radical de la intervención estatal en las gestiones industrial, servicial y urbana, y 2) de la entrega incondicional del crecimiento económico a las inversiones volátiles. Nos referimos a esas dos partes de la fórmula neoliberal de grandes negocios urbanos y/o megaproyectos industriales y turísticos que aún permanecen intocables en las consultas ciudadanas.

Contenidos sustantivos ausentes

hasta hoy en las consultas ciudadanas

Se deja de lado en las consultas ciudadanas que, desde las últimas décadas del siglo pasado, México ha sido víctima de cambios tecnocráticos que han afectado la organización general y el funcionamiento cotidiano, así como las morfologías tradicionales y los paisajes culturales de un número creciente de áreas estratégicas y zonas vulnerables del mundo globalizado. En general, en los foros de Andrés Manuel López Obrador (AMLO) y las plataformas del Movimiento de Regeneración Nacional (MORENA), nadie reconoce aún que estos cambios en las regiones patrimoniales no son ajenos a los impactos de la nueva dinámica económica, siempre especulativa por intereses sectoriales, aunque se pretenda productiva por demagogias partidistas.

Sea el caso del Nuevo Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (NAICM), del Nuevo Tren del Sureste (NTS) o demás propuestas de campaña de AMLO y MORENA, la simpleza objetual de las consultas planteadas impide que los ciudadanos entiendan que muchos de los cambios estructurales habían comenzado en etapas anteriores a la reciente evolución del capitalismo transnacional. Se perjudica así que los mexicanos asuman que su manifestación actual implica importantes diferencias, tanto cuantitativas como, sobre todo, cualitativas, en las regiones patrimoniales.

Uno de los cambios que permanece ignorado en las consultas ciudadanas, a pesar de que ha tenido enorme incidencia en la deformación integral de las más importantes ciudades de nuestro país, es el que se refiere al despliegue incondicional de inversiones inmobiliarias en circunscripciones privatizadas por despojos territoriales, adquisiciones ventajistas o, incluso, por decretos especiales denominados zonas económicas especiales (ZEE). Este despliegue capitalista –cual fenómeno privilegiado por los poderes del Estado mexicano, a pesar de que las principales ciudades: México, Monterrey, Guadalajara, Tijuana, Toluca, Cancún, Mérida, etc., padezcan la intensificación negligente de la mercantilización urbana–, no ha sido expuesto en foros abiertos de AMLO ni en plataformas digitales de MORENA.

En una primera aproximación para la comprensión pública de la especulación metropolitana y la transnacionalización inmobiliaria en las áreas estratégicas y las zonas vulnerables de México, las consultas ciudadanas deberían someter a debate público que el despliegue de inversiones en sitios específicos de las regiones patrimoniales debe entenderse en el marco de la creciente movilidad del capital especulativo. Para ello debería entenderse también que esta movilidad fue producida por la globalización financiera que comenzó a intensificarse en nuestro país al final del siglo pasado y se profundizó bajo los efectos combinados de las nuevas tecnologías de la información y la comunicación, y la aplicación de políticas oficiales de liberalización económica, desregulación administrativa y apertura financiera a los intereses externos.

Sin embargo, dado que no se debate sustantivamente en torno a lo que ocurre hasta hoy en los foros de AMLO ni en las plataformas de MORENA, debemos lanzar ante la opinión pública una pregunta que consideramos resulta estratégica para la gobernanza democrática a nivel nacional: ¿cuáles son las tendencias específicas de la dinámica mercantil de atractivo global que nos permiten hablar de la creciente importancia de los negocios inmobiliarios de interés transnacional como un fenómeno diferenciado respecto a las fases anteriores del capitalismo en México?

Debemos responder que, aunque las nuevas autoridades federales las ignoren en las consultas ciudadanas, hay tres tendencias constitutivas de la nueva fase de modernización capitalista de las principales ciudades que se ha configurado a partir de las crisis del Estado benefactor, integrando la causa principal del desencadenamiento y el fortalecimiento de la mercantilización inmobiliaria en las ciudades fronterizas, turísticas e industriales:

- En primer lugar, la financiación de la economía mundial que, con el estímulo de las políticas de desregulación, privatización y liberalización, cobró mayor impulso en las principales ciudades de México desde mediados de los 90. Esto generó un sustantivo aumento de la oferta de capitales externos en las regiones patrimoniales, una parte muy importante de la cual se interesaba en la inversión inmobiliaria.

- En segundo lugar, el abandono de los esfuerzos regionales para promover una planificación urbana racionalista, normativa y centralizada, y su reemplazo por un esquema instrumental de interés sectorial en el que priman los criterios de mercadeo privado y subsidiariedad forzada del Estado. Esto contribuyó a consolidar situaciones estatales y municipales en la que las decisiones y las acciones de la iniciativa privada podían desplegarse con privilegios incondicionales.

- Finalmente, la generalización del esquema instrumental de las inversiones inmobiliarias en el marco de los nuevos enfoques estatales y municipales de gestión tecnocrática de los proyectos de obras de infraestructura y servicios urbanos, vinculados a las estrategias pagadas de competitividad urbana y mercadeo urbano, mediante las cuales las autoridades buscan, explícita y deliberadamente, atraer más capitales externos. Esto ha contribuido a aumentar la inversión inmobiliaria privada y potenciar su papel intervencionista en las transformaciones urbanas, así como fragmentador y diferenciador en las conjunciones metropolitanas.

Las tres tendencias señaladas explican que la actual situación de las principales ciudades, radicalmente diferentes de las urbes industriales y comerciales del siglo pasado, se caracteriza por la creciente importancia del papel de la inversión privada de origen transnacional y, consecuentemente, por la imposición de una lógica especulativa en el crecimiento urbano. A pesar de todo, ninguno de estos dos procesos aparece aún en las consultas ciudadanas de AMLO, debido a que ambos son manejados como cuestiones especiales que deben administrarse desde la gobernanza ciudadana.

Debemos decir que las consultas ciudadanas ignoran que la situación de las principales ciudades está relacionada con el impulso sectorial y partidista de un conjunto de proyectos vinculados a reformas estructurales, orientadas fundamentalmente por postulados mercantiles del discurso especulativo que se impuso simultáneamente con el avance de la globalización en nuestro país. En este contexto tampoco asumen que las áreas estratégicas y las zonas vulnerables son escenarios de múltiples experimentos neoliberales, bautizados generalmente con el eufemismo de “boom inmobiliario”, que han generado diversos cambios arbitrarios en política económica que ahora insisten en llevar a cabo.

Como parte del proceso capitalista que se esconde desde las consultas ciudadanas, sucede que continúa el incremento de los negocios inmobiliarios en las principales ciudades y comienzan estos en otras regiones patrimoniales de México. Esto significa, en pocas palabras, que se insiste en que el efecto decisivo en la transformación social sea la metamorfosis mercantil del crecimiento urbano bajo gobernanza demagógica. Por esta razón, además de pronunciarnos contra este modelo del capitalismo inmobiliario, pedimos a AMLO y MORENA: ¡¡¡Qué la gobernanza en México no sea más para ocultar intereses especulativos en la gestión pública!!!

Conclusiones

Se asume en las consultas ciudadana que las inversiones inmobiliarias son un suceso extraordinario gracias a las virtudes globales de las principales ciudades, sin referir nunca que este es un fenómeno común en diversas urbes de América Latina. Nadie especifica o sugiere, desde los foros abiertos de AMLO o las plataformas digitales de MORENA, que se trata de recursos especulativos que se orientan siempre a construir grandes complejos comerciales, modernos edificios de oficinas y lujosos conjuntos de residencias.

Bajo el esquema general de gobernanza demagógica que prevalece en México bajo control de los gobiernos panistas, priistas, perredistas, etc., la participación ciudadana no ha servido para reconocer que la ocurrencia del crecimiento económico en ciudades medias y pequeñas, más o menos imbricadas en la dinámica globalizada, las ha convertido también en escenarios utilitarios para la valorización oportunista de los capitales móviles.

Gracias a la revisión de lo que AMLO y MORENA pretenden como gobernanza ciudadana, hemos concluido que los programas federales no pueden ser más recursos de la demagogia sectorial y partidista. Esto significa que no pueden ser esquemas que sirvan para ocultar que los capitales volátiles no solo son los principales causantes de la metropolitanización negligente por todos los rumbos de México, sino también de la fragmentación urbana y la desigualdad territorial que tratan de ocultar las autoridades estatales y municipales.

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