Por Antropólogo Jorge Franco CáceresIntroducción
Sin ignorar los acuerdos globales en torno al problema climático en las cumbres de las COP de la ONU, como la última realizada hace unos días en Polonia, no cabe duda que el paisaje cultural y el turismo premium tienen relevancia clave para el presente mercantil de las empresas turísticas transnacionales en México, pero también lo tienen para el futuro sostenible a largo plazo del desarrollo económico en las zonas marinas y costeras de la península de Yucatán.
En realidad, no son pocos los científicos y los investigadores regionales que sostienen que, según se relacionen los paisajes marinos y costeros con el turismo premium desde la gestión política y la planificación económica, dependiendo de cómo se influyan a partir de la instrumentación civil de las obras marinas y terrestres y los servicios costeros, podría impulsarse en la práctica social algún modelo de sostenibilidad a largo plazo.
En pocas palabras, la Presidencia de la República y la Secretaría de Turismo deben saber que el desarrollo turístico sostenible en torno a los patrimonios natural y cultural –tales como son los casos de los paisajes marinos y costeros de nuestras áreas estratégicas y zonas vulnerables de mayor interés en el mercado global–, es el asunto que realmente se encuentra en juego en la península de Yucatán. Veamos entonces la explicación de esta cuestión, a partir de varias preguntas centrales con sus respectivas respuestas.
1.- ¿Qué sucede actualmente con la interacción del turismo premium y el paisaje cultural en las zonas marinas y costeras de la península de Yucatán?
Cuando la interacción del turismo premium y el paisaje cultural no se realiza con atención a las características y las dimensiones de los múltiples impactos que ocasiona –según los protocolos internacionales, las legislaciones federales y los usos ancestrales–, no solo se comprometen las proyecciones turísticas de los sectores empresariales, sino también las plataformas patrimoniales de las poblaciones regionales y las comunidades tradicionales.
A decir verdad, si el complejo binomio en cuestión no se realiza de manera integral y comprensiva en las zonas marinas y costeras de la península de Yucatán, sea frente a las amenazas climáticas globales y/o los peligros antropogénicos urbanos, se arriesgan los más importantes procesos integradores del paisaje cultural como patrimonio social y legado ancestral. Se trata aquí de lo que sucede, debido a un complejo fenómeno industrial que mantiene bajo incertidumbre permanente a los más determinantes procesos espacio-territoriales, medioambientales y socioculturales, que acreditan, incluso, al paisaje cultural como valor mercantil a nivel global para el turismo de clase mundial.
2.- ¿Cuál es el valor del paisaje cultural de las zonas marinas y costeras de la península de Yucatán para la industria global del turismo premium?
Aunque el paisaje cultural ha sido colocado tradicionalmente al margen de la economía y la sociedad, como si se tratara de un aspecto de corte medioambiental o espacio-territorial, esto no procede en el caso del avance económico y el desarrollo social vinculado al turismo premium en las zonas marinas y costeras de la península de Yucatán. No sucede así porque las fuerzas económicas que lo dominan a nivel global han aprovechado la cultura regional, así como han instrumentado la identidad local, para expropiarlo en las áreas comunes y explotarlo en las reservas nacionales, es decir, para despojarlo y saquearlo en los sitios paradisíacos de modo excluyente, aprovechándose, inclusive, de las condiciones creadas por los fenómenos extremos vinculados al cambio climático para hacerse dueños de los legados ancestrales.
Aquí conviene señalar que, mediante usos exclusivos y servicios elitistas del turismo recreativo, las fuerzas del mercado global protegen sus intereses especulativos y sus deseos acaparadores del paisaje cultural de mares y costas en sitios como Cancún, espacios como la Riviera Maya, zonas como Isla Mujeres y Cozumel, la Costa Maya, Mérida, Telchac, Chichén Itzá, Champotón, etc., desde los proyectos privados y las gestiones oficiales relacionadas con los bienes patrimoniales.
3.- ¿Tiene el turismo premium el poder económico y el respaldo político para imponer plenas condiciones mercantiles al paisaje cultural de las zonas marinas y costeras de la península de Yucatán?
El turismo premium a nivel global es un poderoso fenómeno mercantil que arrastra otras industrias, modifica ambientes, mueve poblaciones, somete a otros poderes e impone comunicaciones, etc., dejando siempre de lado los impactos múltiples que ocasiona a los procesos integradores del paisaje cultural. Es decir, aunque el crecimiento del turismo de clase mundial en las zonas marinas y costeras de la península de Yucatán haya reconocido alguna vez que desarrolla líneas económicas que requieren de los patrimonios naturales y urbanos para capitalizarse, siempre se ha desconocido y/o se despreciará el predominio mercantil que impone sobre la cultura regional y la identidad local. He aquí el impacto colosal a nivel social y cultural que se oculta detrás del control patrimonial y el manejo mercantil del paisaje marino y costero que el gobierno federal y el Estado mexicano permiten al turismo premium.
4.- ¿Cuál es la clave científica de interés social para la comprensión del impacto múltiple del turismo premium sobre el paisaje cultural de las zonas marinas y costeras de la península de Yucatán?
La clave es la investigación avanzada de la creciente transformación arbitraria del espacio-territorio de las costas y los mares peninsulares desde Holbox hasta Chetumal, en Quintana Roo; desde Celestún hasta El Cuyo, en Yucatán, y desde Isla Arena hasta Isla del Carmen, en Campeche, al paso avasallador de los desarrollos inmobiliarios del turismo premium con inmejorable predominio mercantil a nivel global. Esta investigación es determinante, porque ahí se ha realizado la construcción radical de un paisaje híbrido y desarticulado en las áreas estratégicas y zonas vulnerables de mayor atractivo a nivel turístico global. Hemos visto surgir desarrollos inmobiliarios por aquí y por allá, unos con campos de gol, otros con marinas recreativas algunos con zonas arqueológicas exclusivas; los hay como cadenas hoteleras con playas privadas, otros además con balnearios recreativos en caletas y cenotes, etcétera.
En todos los espacios-territorios de notable interés turístico empresarial es donde hoy se contraponen lo natural-ancestral con lo antropogénico-comercial, en constante modificación-alteración de interés público-privado. Todo parece indicar que el paisaje cultural ya es ahí un lamentable producto complejo por polifacético y veleidoso, que requiere respuestas contemporáneas acordes con las características y las dimensiones de los impactos que son evidentes en este nuevo paisaje. Y es que ciertamente no contamos aún con alguna matriz de impacto múltiple del turismo premium sobre el paisaje cultural de la península de Yucatán, y menos con un mapeo geográfico de su localización que nos facilite el avance hacia la caracterización y el dimensionamiento del mismo en el shore y el hinterland.
5.- ¿Qué corresponde al Estado mexicano y al gobierno federal frente al impacto múltiple del turismo premium sobre el paisaje cultural de las zonas marinas y costeras de la península de Yucatán?
Para comenzar, les corresponde entender el paisaje cultural de los mares y las costas como un patrimonio social o bien común que podría llegar a perderse por no ser un recurso renovable, y comprometerse también con la concepción de calidad en el paisaje cultural. Estos deben ser preceptos científicos y sociales para incentivar la implementación y optimización de los medios capaces de articular su conservación, su protección y su recuperación con respaldo de las instancias oficiales.
Por otro lado, la inclusión de la idea de imagen patrimonial y los conceptos del patrimonio paisajístico, son puntos importantes del compendio de intereses referentes al paisaje cultural marino y costero frente a los proceso desintegradores que le imponen los desarrollos inmobiliarios y el crecimiento urbano asociados al turismo premium. Sobre esto es oportuno recordar los alarmantes datos sobre los crecimientos poblacionales pretendidos en ámbitos ancestrales y sitios tradicionales como Tulum, Puerto Morelos, Majahual, Telchac, Chichén Itzá, etc., que tendrán nuevos asentamientos urbanos y mayores poblaciones turísticas en Quintana Roo, Yucatán y Campeche.
6.- ¿Qué lugar tiene el tema del Estado de derecho frente al impacto múltiple del turismo premium sobre el paisaje cultural de las zonas marinas y costeras de la península de Yucatán?
Se trata de un tema central, porque la península de Yucatán es área estratégica para los intereses globales y también zona vulnerable frente a los fenómenos extremos, ambos vinculados con los avances regionales de la industria global del turismo premium. No cabe duda de que constituir leyes, respaldar instituciones e integrar organizaciones conforme a derecho, que garanticen la aplicación de las leyes federales y los usos ancestrales del paisaje cultural, en las pequeñas islas, las islas de barrera, las aguas bajas, las zonas de intercambio tierra-mar, etc., resultará determinante del avance hacia un modelo de sostenibilidad. La Nueva Secretaría de Turismo deberá demostrar en los hechos de la planificación integral y sostenible que es plena en el dominio sustantivo de estos asuntos.
Para el desarrollo turístico integral y sostenible a largo plazo en los tres estados peninsulares, se necesita también poner mucha más atención científica y social a los terribles impactos que están ocasionando los desarrollos inmobiliarios sobre las redes de relaciones sociales regionales, municipales, locales, tradicionales, ancestrales, etc. Así, se tendrá la posibilidad de contar con una plataforma política y social cierta para pugnar por leyes y proyectos que respondan a esas poblaciones en términos rotundos frente a la trilogía de la miseria: marginación, desempleo y migración, que padecen luego de años de abandono de los subsidios federales y los programas asistenciales.
Todo lo sucedido en torno a los patrimonios culturales de mares y costas en la península de Yucatán se ha debido a que la única gestión política que ha prevalecido en las relaciones diplomáticas y la única planificación económica que se ha impuesto desde las esferas de los poderes públicos ha sido la de la industria mercantil de calificación premium del mundo global.
7- ¿Cuál es la propuesta final de interés regional ante el impacto múltiple del turismo premium sobre el paisaje cultural de la península de Yucatán?
No cabe duda de que desde las investigaciones científicas, las legislaciones estatales, las estrategias institucionales y los movimientos sociales, lo que se realice desde la península de Yucatán en términos de estrategias científicas y sociales para la certificación de la sostenibilidad de este modelo de desarrollo turístico –avasallador de la cultura y la identidad bajo las actuales condiciones del cambio climático–, resultará determinante del bienestar integral de la población en las zonas marinas y costeras de México. Se contará así con una respuesta estratégica para orientar el desarrollo económico y social a largo plazo en las áreas mejor aspectadas en términos paisajísticos, y también mejor posicionadas en el interés del mercado turístico global. Por esta razón, más allá de lo que suceda en las COP de las Naciones Unidas, el compromiso de la Presidencia de la República y la Secretaría de Turismo debe ser avanzar en la perspectiva de estas líneas estratégicas de investigación avanzada.