Antropólogo Jorge Franco Cáceres
Las principales cartas de recomendación de las iniciativas de la Cuarta Transformación (4T) han sido las reacciones partidistas y las oposiciones sectoriales que las pretendan como ocurrencias del presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador (AMLO), e imposiciones por mayoriteos del Movimiento de Regeneración Nacional (MORENA) desde el Congreso de la Unión.
Atorados en que se trata de disparates aplicados por descontones morenistas, PAN, PRI, PRD, MC, Coparmex, Concanaco, Banamex, etc., han sido incapaces de ser oposición seria a los temas centrales del programa social e histórico de la 4T: 1) Cambio democrático; 2) Combate a la corrupción; 3) Pacificación nacional; 4) Austeridad republicana; 5) Respaldo económico a la población más pobre, y 6) Desarrollo regional de áreas rezagadas, impulsados desde los poderes del Estado mexicano.
Transcurrido más de un año del triunfo que llevó al Ejecutivo y al Legislativo federales a las fuerzas de la resistencia democrática, AMLO y MORENA no demuestran preocupación por acusar compulsivamente a los jefes partidistas y menos en señalar aversivamente a los líderes sectoriales. Y no lo hacen porque la mayoría de los mexicanos ha visto que ellos no han pasado de creer que cuestionan las resoluciones estatales –especialmente cuando las tachan de errores presidenciales y golpes lesgislativos–, sin contraponer contenidos de interés nacional desde ningún programa opositor.
A pesar de las quejas personales, las calumnias mediáticas, las amenazas empresariales y las marchas publicitarias, las reacciones y las oposiciones señaladas, nada relevante han podido hacer contra las decisiones de los actuales poderes estatales. Esto nos ha llevado a pensar que PAN, PRI, PRD, MC, etc., no son opositores a las iniciativas de la 4T, pues hasta hoy carecen de propuestas partidistas, convocatorias ciudadanas y fórmulas de resistencia y movilización.
Ante tantas incapacidades y preocupaciones de las fuerzas aversivas del régimen democrático y republicano, se ha pretendido desde algunos medios que sí hay verdaderas oposiciones a la 4T. Se habla de casos específicos, como el de Mexicanos contra la Corrupción e Impunidad. A partir de ellos, se presume que, gracias a investigaciones profesionales y por las pruebas presentadas a los tribunales, esta organización ha logrado frenar la construcción del aeropuerto en la base militar de Santa Lucía mediante un amparo en el Tribunal Federal Justicia. Y que a partir de esa resolución, se han llevado a cabo 147 juicios en contra de la construcción de la obra.
Otro caso ponderado desde los medios como verdadera oposición a la 4T, proviene del sector privado más activo y militante. Aquí, el presidente de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex), Gustavo de Hoyos, ha divulgado que impulsa una iniciativa ciudadana a nivel nacional, con la intención de capacitar a empresarios, estudiantes, líderes sindicales, académicos y otras personas, para motivar actividades a favor del medio ambiente, la seguridad, el emprendedurismo y las causas de género.
Se trata del nuevo proyecto “Alternativas por México” de la Coparmex que, luego de fracasar con sus plataformas anticorrupción por apoyar al PAN de Fox Quesada y Calderón Hinojosa y al PRI de Peña Nieto, ahora se pretende como una oposición avanzada e incluyente. Anuncia que ahora sí estará abierta a la participación de otras organizaciones de la sociedad civil que compartan sus ideas elitistas de la democracia liberal.
Por su parte, la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH), encuentra finalmente algo que hacer desde una recomendación judicial en la que se menciona la violación a los derechos humanos debida a la aniquilación del corrupto Programa de Estancias Infantiles. Se pretende esta acción como verdadera oposición a la 4T, señalando que muchas madres jefas de familia dependían de ellas para poder continuar con la educación y el cuidado de sus hijos mientras iban a trabajar.
La neoliberal CNDH señala ahora que, entre los meses de febrero y abril de 2019, se presentaron en el organismo nacional 204 quejas por presuntas violaciones a los derechos humanos de 5,340 personas agraviadas, de las cuales 2,049 fueron madres y padres; 1,662 niñas y niños; 1,310 responsables de estancias; 117 diputados federales y locales, y 202 personas (bajo otro estatus legal). Nadie puede entender cómo puede pretenderse verdadera oposición una comisión que sirvió de tapadera a las peores causas durante la dictadura tecnocrática en México.
Otra reacción que se pretende también como verdadera oposición a la 4T, corresponde a los contingentes de despedidos y liquidados que han marchado en contra de la cancelación del Nuevo Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México, en Texcoco, y otros grupos que se pronuncian contra la austeridad republicana o los megaproyectos regionales. Ya hemos visto los afanes continuos en Yucatán para pretender una verdadera oposición conservadora al Tren Maya.
En conclusión, podemos decir que nada se ha evidenciado más desesperación desde las fuerzas aversivas a la 4T, que señalar que esas iniciativas puntuales son verdaderas oposiciones sistémicas a decisiones de los actuales poderes del Estado mexicano.
Ojalá las reacciones partidistas y las oposiciones sectoriales pierdan la torpeza golpista al hablar de un programa social y político que ignoran y dispongan informarse en las temáticas correspondientes a esta agenda democrática y republicana para que tengan alguna utilidad histórica.