QUEBEC, Canadá, 8 de febrero (AFP).- El joven canadiense culpable del asesinato de seis fieles en la mezquita de Quebec en enero del 2017, el peor ataque a un lugar de culto musulmán en Occidente, fue condenado este viernes a cadena perpetua, con un período de seguridad de 40 años.
Los fiscales pedían una pena ejemplar de 150 años de detención contra Alexandre Bissonnette, pero la demanda fue calificada de “no razonable” por el juez François Huot.
El magistrado consideró en su fallo que el asesino dio pruebas de un “odio visceral por los inmigrantes de origen musulmán” y no podrá pedir su liberación antes de haber cumplido 67 años.
El joven asesino, un exestudiante de ciencias políticas seducido por las ideas nacionalistas y supremacistas, escuchó en silencio y con la cabeza gacha, durante más de seis horas, la lectura del fallo.
El domingo 29 de enero del 2017 a las 19H55, Bissonnette atravesó la puerta principal de la mezquita de Quebec con un rifle y abrió fuego sobre los 40 hombres y cuatro niños que conversaban tras haber orado en la gran sala de la planta baja del edificio.
Seis hombres cayeron muertos bajo las balas y cinco resultaron heridos de gravedad. Uno de ellos quedó tetrapléjico.