El Papa León XIV entregó este sábado 62 piezas y reliquias pertenecientes a comunidades indígenas de Canadá, que desde 1925 formaban parte de las colecciones de los Museos Vaticanos.
La devolución responde a una demanda histórica de pueblos originarios que han solicitado la recuperación de objetos culturales bajo resguardo del Vaticano desde hace casi un siglo.
La entrega tuvo lugar durante una reunión con la delegación canadiense encabezada por Pierre Goudreault y Jean Vézina, presidente y secretario de la Conferencia Episcopal de Canadá, además del arzobispo de Vancouver, Richard Smith.
Un gesto que profundiza la reconciliación con comunidades indígenas
De acuerdo con un comunicado conjunto del Vaticano y la Iglesia canadiense, el regalo simboliza la continuación del camino iniciado por el papa Francisco, especialmente tras su viaje apostólico a Canadá en 2022 y la publicación de la Declaración sobre la Doctrina del Descubrimiento en 2023, que marcó un hito en el reconocimiento de agravios históricos hacia los pueblos originarios.
El Vaticano describió la devolución como “un signo concreto de diálogo, respeto y fraternidad”, en el marco del Jubileo de 2025 y del centenario de la Exposición Misionera Vaticana.
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Las piezas provienen precisamente de aquella Exposición Misionera de 1925, promovida por Pío XI, y habían permanecido en el Museo Etnológico Anima Mundi.
Organizaciones indígenas celebran la restitución
Diversas organizaciones indígenas, como la Federación de Naciones Indígenas Soberanas (FSIN), la Asamblea de Primeras Naciones y el Consejo Nacional de Métis, habían solicitado formalmente la devolución de pipas ceremoniales, vestimentas, ornamentos y otros objetos culturales resguardados en el Vaticano.
Las líderes indígenas Cindy Woodhouse y Victoria Pruden, presentes meses atrás en la entronización de León XIV, habían reiterado la importancia cultural, espiritual e histórica de estas piezas para sus comunidades.
Canadá garantizará la conservación del patrimonio devuelto
Durante el acto de entrega, la Conferencia Episcopal de Canadá se comprometió a proteger, conservar y promover adecuadamente los objetos restituidos, que serán reintegrados a las comunidades de origen conforme a procesos de consulta y acompañamiento cultural.
Este gesto constituye uno de los pasos más significativos en el proceso de reconciliación entre la Iglesia y los pueblos indígenas de Canadá, reforzando un vínculo que busca sanar heridas históricas y restaurar su patrimonio cultural.
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