Síguenos

Última hora

Eligen a Alfonso Baas Moo como el nuevo comisario ejidal de Tahmek

Internacional

Europa enfrenta una crisis por peste porcina africana: sacrificios masivos, pérdidas millonarias y países en alerta máxima

La peste porcina africana golpea a 13 países de la Unión Europea con brotes activos, sacrificios masivos, restricciones sanitarias y graves pérdidas económicas. Este es el panorama actualizado de la enfermedad en la región.

La expansión de la peste porcina africana mantiene en alerta a Europa
La expansión de la peste porcina africana mantiene en alerta a Europa / Archivo

La peste porcina africana (PPA) mantiene en tensión a la Unión Europea. La enfermedad, presente actualmente en trece países del bloque, ha obligado a aplicar medidas sanitarias estrictas y a sacrificar miles de animales, generando pérdidas millonarias para el sector porcino.

La normativa comunitaria establece protocolos de vigilancia, control de focos y restricciones de movilidad que cada país aplica según su situación epidemiológica. Sin embargo, la persistencia del virus en jabalíes y su avance territorial continúa presionando a autoridades y productores.

Polonia y Alemania: los focos más persistentes

Polonia permanece como uno de los epicentros de la PPA desde 2014. En 2025 suma 18 focos en granjas y casi ocho mil cerdos sacrificados, mientras que los jabalíes siguen siendo el principal vector de contagio.

El país acumula pérdidas superiores a los cinco mil millones de euros en la última década y ha visto desaparecer 80 por ciento de sus explotaciones porcinas.

En Alemania, aunque este año no se han registrado casos en granjas domésticas, sí se han detectado mil 948 contagios en jabalíes.

Tres binomios fueron entrenados para la detección a tiempo del gusano barrenador en el ganado

Noticia Destacada

Con binomios caninos buscan frenar el avance del gusano barrenador en México y Centroamérica

Las autoridades mantienen una estrategia intensa de rastreo de cadáveres, campañas informativas y máximas medidas de bioseguridad para evitar que el virus entre en las explotaciones comerciales.

Italia, República Checa y Eslovaquia: control parcial y medidas extremas

Italia ha identificado 580 focos desde 2022, casi todos en jabalíes, y ha sacrificado a más de 117 mil animales como parte de su plan extraordinario.

Aunque logró erradicar la enfermedad en regiones como Cerdeña o Basilicata, la presión continúa en zonas del norte. A ello se suma un impacto económico significativo: mientras las exportaciones crecieron, varios países —entre ellos China, Japón y México— mantienen bloqueos que han costado más de 600 millones de euros.

La República Checa reporta una “situación favorable” tras su último caso en agosto de 2025, aunque continúa con vigilancia en zonas de riesgo. Eslovaquia, por su parte, sacrificó 18 mil cerdos en un solo foco este año y mantiene restricciones en doce provincias.

Rumania y Croacia: los brotes más activos del bloque

Rumania concentra 66 por ciento de todos los brotes registrados en la Unión Europea. Solo entre enero y noviembre de 2025 contabilizó 453 nuevos casos, además de dos mil 700 sanciones por violaciones sanitarias. Las autoridades han realizado más de 28 mil inspecciones para frenar la expansión.

En Croacia, 53 explotaciones están afectadas y se han detectado 372 jabalíes enfermos. El país ha sacrificado 55 mil cerdos desde 2023, equivalente al 5 por ciento de su cabaña porcina.

Hungría, Bulgaria, Grecia y Letonia: panorama mixto

Hungría enfrenta 852 casos en jabalíes solo en 2025 y mantiene un tercio de su territorio bajo clasificación de “zona infectada”. Bulgaria registra 409 brotes en jabalíes, aunque asegura tener la situación controlada gracias a una valla en la frontera con Rumania. Grecia es el único país sin brotes recientes.

En Letonia, donde la PPA es endémica desde 2014, un brote reciente obligó a destruir 23 mil cerdos, lo que generó un fuerte impacto económico para los productores locales.

La expansión de la peste porcina africana mantiene en alerta a Europa, con países que combinan sacrificios, restricciones comerciales, vigilancia epidemiológica y medidas de bioseguridad para evitar una crisis sanitaria aún mayor en el sector porcino.

SÍGUENOS EN GOOGLE DISCOVER: DA CLICK AQUÍ

IO