
Casi 123 mil vuelos comerciales se vieron afectados entre enero y abril de este año por interferencias en sistemas satelitales de navegación, según un informe elaborado por Suecia y cinco países vecinos.
La investigación, divulgada por la cadena SVT, apunta a que las señales provienen de territorio ruso.
La Agencia Sueca de Transporte documentó un incremento significativo de alertas en los últimos meses, incluidas las que afectaron al avión en el que viajó la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, hacia Bulgaria.
En total, 122 mil 607 vuelos de 365 aerolíneas experimentaron distorsiones en rutas aéreas que atraviesan Polonia, Estonia, Letonia, Lituania, Finlandia y Suecia.
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Cómo afectan las interferencias al GPS
Las autoridades explicaron que las perturbaciones incluyen tanto el bloqueo de señales como la suplantación con datos falsos (spoofing), lo que ocasiona errores de posición o fallas en sistemas de navegación que pueden acompañar al avión hasta el final del trayecto.
En ciertos espacios aéreos, más del 40% de los vuelos registraron problemas en su GPS.
Rusia, señalada como origen de las señales
Los emisores fueron localizados en Kaliningrado, San Petersburgo, Smolensk y Rostov, todos dentro de territorio ruso.
“Podemos afirmar, y además tenemos pruebas, de que las perturbaciones se originan en Rusia”, aseguró Andreas Holmgren, jefe de unidad de la Agencia Sueca de Transporte.
Según datos oficiales, en Suecia los incidentes se han multiplicado: en 2023 se registraron 55 casos, mientras que solo en 2024 ya sumaban 495. En lo que va de 2025, la cifra superó los 733 reportes.
Advertencia de organismos internacionales
Los países afectados notificaron a la Organización de Aviación Civil Internacional (OACI), que instó a Moscú a cumplir sus compromisos internacionales y detener las interferencias de inmediato.
“Se trata de un riesgo grave para la seguridad aérea”, subrayaron las autoridades. Hasta el momento, el gobierno ruso no ha respondido oficialmente a las acusaciones.
IO