Durante la conferencia matutina encabezada por la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo desde Palacio Nacional, el secretario de Salud, David Kershenobich Stalnikowitz, presentó un informe detallado sobre el estado de los trasplantes de órganos en México, destacando avances médicos, altos niveles de sobrevida y el papel central del sistema público de salud.
El funcionario subrayó que, si bien la prevención es un eje prioritario del sistema de salud, la atención médica especializada, como los trasplantes, es un componente esencial.
En los últimos meses, dijo, se ha fortalecido la capacidad hospitalaria y el suministro continuo de medicamentos inmunosupresores, indispensables para el éxito de estos procedimientos a largo plazo.
Trasplantes de riñón: el mayor volumen y alta sobrevida
Kershenobich informó que se han realizado dos mil 783 trasplantes de riñón, de los cuales 76 por ciento tuvieron lugar en hospitales públicos. En un periodo acumulado de cinco años, el país suma más de 14 mil trasplantes renales, tanto de donante vivo como de donante fallecido.
Un dato relevante es la sobrevida: alcanza 93.5 por ciento cuando el donante es vivo y 84.2 por ciento cuando proviene de una persona fallecida, cifras que consolidan la capacidad médica del país.
El secretario destacó que quienes reciben un riñón pueden reincorporarse a una vida prácticamente normal.
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Hígado y corazón: procedimientos complejos con resultados sólidos
En el caso de los trasplantes de hígado, se reportaron 245 procedimientos, también con predominio del sector público.
La sobrevida a cinco años se ubica en 71.5 por ciento, en línea con estándares internacionales. Además, recordó que existen trasplantes de hígado de donante vivo, con recuperación completa tanto para quien dona como para quien recibe.
Respecto a trasplantes de corazón, se realizaron 46 procedimientos, incluidos casos duales de corazón y riñón. La sobrevida reportada permite a los pacientes retomar una vida funcional tras haber enfrentado condiciones críticas.
Donación de órganos, clave para reducir listas de espera
Más allá de las cifras, el secretario de Salud enfatizó la necesidad de fomentar la donación de órganos. Un solo donante puede salvar hasta ocho vidas, y la mayoría de estos trasplantes se realizan en hospitales públicos, que además garantizan el acceso de por vida a los medicamentos necesarios.
Finalmente, Kershenobich llamó a informarse y registrarse como donador voluntario, al señalar que México ya cuenta con avances legislativos y médicos para garantizar que cada órgano donado tenga un impacto real. “Donar es trascender”, resumió, al presentar la campaña orientada a construir un país sin listas de espera.
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