Durante la conferencia mañanera desde el Salón Tesorería de Palacio Nacional, el Gobierno federal aclaró la relación entre el uso de videojuegos, la salud mental y las adicciones, un tema que ha generado debate público en los últimos meses, especialmente entre jóvenes, padres de familia y comunidades gamer.
A pregunta expresa sobre la posible estigmatización del consumo de videojuegos y su vínculo con la violencia, tanto la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo como el secretario de Salud, David Kershenobich Stalnikowitz, ofrecieron precisiones clave y anunciaron una decisión relevante en materia fiscal.
Videojuegos y salud mental: un fenómeno en análisis
El secretario de Salud explicó que el impacto de los videojuegos en el bienestar emocional de adolescentes es un fenómeno relativamente nuevo, con características distintas a las observadas en estudios previos.
Señaló que no existía un nivel de análisis comparable en años anteriores y que, por ello, el tema requiere un estudio cuidadoso y sin generalizaciones.
Kershenobich subrayó que el principal factor de riesgo no es el videojuego en sí, sino el contenido violento de algunos títulos, así como su combinación con otros elementos de riesgo.
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De acuerdo con datos de la encuesta nacional presentada por la Secretaría de Salud, en muchos casos donde se registra violencia también existe consumo de alcohol o drogas, lo que apunta a una problemática multifactorial.
Sheinbaum anuncia que no habrá impuesto a los videojuegos
En su intervención, la presidenta Claudia Sheinbaum confirmó que el Gobierno federal decidió no cobrar el impuesto a los videojuegos, pese a que inicialmente se había contemplado en la discusión fiscal. Explicó que la medida fue descartada por la complejidad de su aplicación.
“La dificultad está en distinguir qué videojuegos tienen violencia y cuáles no. ¿Quién determina eso y con qué criterios?”, cuestionó la mandataria. Ante ese escenario, afirmó que gravar a toda la industria no era una solución adecuada ni justa.
Prevención y campañas, el nuevo enfoque del Gobierno
En lugar de un impuesto, Sheinbaum indicó que la estrategia se centrará en campañas informativas dirigidas a jóvenes y adolescentes, enfocadas en advertir sobre los riesgos del uso excesivo de videojuegos, especialmente aquellos en línea que pueden generar adicción, gastos económicos y normalización de conductas violentas.
Estas acciones se integrarán a la campaña nacional “Por la paz y contra las adicciones”, que busca atender las causas del malestar psicológico desde una perspectiva preventiva, educativa y comunitaria.
Sin estigmatizar, pero con responsabilidad social
Tanto la presidenta como el secretario de Salud coincidieron en que no se debe criminalizar ni estigmatizar a quienes consumen videojuegos, ya que también existen aspectos positivos asociados a su uso.
No obstante, reiteraron que es indispensable regular contenidos, promover el consumo responsable y fortalecer la orientación familiar y escolar.
El Gobierno federal insistió en que la construcción de paz entre las juventudes pasa por información clara, prevención temprana y políticas públicas basadas en evidencia, no en sanciones generalizadas.
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