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Quintana Roo

Perito de Fiscalía salió ladrón

Por Gabriel Aguilar

COZUMEL, 22 de noviembre.- Personal de Servicios Periciales de la Fiscalía General del Estado inmiscuido en robo. Un caso que se trató de ocultar al máximo focaliza a por lo menos a un elemento del Servicios Periciales que habría robado pertenencias dentro de un local que fotografiaban, tras un reporte de robo.

No sucedió esta semana ni este mes, aunque tiene la misma relevancia en virtud por quien lo cometió, y al menos uno de los señalados del robo sigue en la institución y acude a fotografiar locales, casas, escuelas u otros edificios cuando hay una denuncia por robo, obviamente sin permitir que nadie ingrese bajo el argumento de no contaminar la escena.

El caso en cuestión sucedió el 23 de julio de este año, cuando alrededor de las 22:30 horas fue detectado un robo al interior de una casa situada sobre la calle Adolfo Rosado Salas entre 25 y 30 avenida de la colonia Centro.

Esa ocasión el afectado de iniciales A. P. T., llegó a su casa a eso de las 10 de la noche, llevándose la sorpresa que les habían entrado a robar. Lo primero que detectó como faltante fue un televisor de 32 pulgadas de la marca Samsung.

Varias pertenencias estaban regadas por el piso, optando por avisar a las autoridades policíacas, siendo acordonada la escena del robo a las 22:34 horas a cargo de elementos de la Policía Municipal.

Datos obtenidos establecen que a las 22:48 horas, arribaron elementos de la Policía Ministerial, además de un hombre y una mujer de Servicios Periciales, a quienes se les hizo entrega del lugar para el levantamiento de indicios, fotografías y diligencias preliminares de investigación.

Cronológicamente se supo que a las 23:36 horas, la abogada de la familia atracada solicitó la presencia de la Policía Municipal debido a que alguien de los que entraron a la escena criminal había robado una pulsera presuntamente de oro de la marca Pandora y la cantidad de 3 mil pesos en efectivo que estaban dentro de una bolsa de dama, propiedad de la integrante de la familia A. P. M., quien llegó minutos antes que ingresaran los de la fiscalía.

La abogada pidió a la Policía Municipal intervenir para revisar a dos elementos de la Policía Ministerial y a dos de Servicios Periciales, avisándoles a los de la Fiscalía que, de encontrarles los objetos o el efectivo, serían puestos a disposición de la institución para la que trabajan por el delito de robo y/o lo que resulte.

Aunque no batallaron mucho para la revisión ya que uno de los elementos de Servicios Periciales entregó el dinero así como la pulsera, aceptando que lo había tomado creyendo sin que nadie se diera cuenta, bajo el argumento que “la marca le gusta a su novia”.

La propietaria del dinero y la pulsera testificó en su momento que había tomado fotografías de la casa al llegar después de conocer el robo, también a las pertenencias que llevaba en su bolso, pero cuando tomó su bolsa luego de la intervención de los peritos de la Fiscalía se percató que ya no estaban la pulsera ni el dinero.

Extraoficialmente, se supo que de Servicios Periciales le suplicaron a la familia que no procediera contra los peritos, incluso llegando a ofrecerse a pagar el televisor que fue robado con tal que no los detuvieran y se conociera tal escándalo, pues después de haber sido afectados por la delincuencia llegaron los de Servicios Periciales y se apoderaron de lo que quedó a la vista.

El caso es que la familia no procedió contra nadie, y por lo menos el perito que devolvió el dinero y la pulsera continúa trabajando en la Fiscalía General del Estado, de hecho sigue teniendo intervenciones en escenas criminales donde han sucedido robos y ha habido casos donde busca que la prensa no tenga visibilidad de lejos.

También de manera no oficial, se supo que podría haber más involucrados, lo cual viene siendo un asunto al que la Fiscalía General del Estado debería investigar, ya que en Cozumel, cuando sucede un robo a comercio, casa, escuela, u otro, los elementos de la Policía Ministerial y del Servicios Periciales tratan que nadie entre al interior, solo ellos, bajo la excusa de preservar el lugar, sin que se sepa que hacen al interior realmente.

 

 

 

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