Por Yolanda Gutiérrez
Se reporta una ocupación hotelera de 84.3 puntos porcentuales en la zona de playas y Puerto Morelos, mientras que en el centro los índices son del 86%, con expectativas de rebasar el 90 por ciento durante el período vacacional, según informaciones proporcionadas por la Asociación de Hoteles.
Mientras que en la zona de playas muchos hoteles mantienen muy buenos niveles de ocupación, debido a que compaginan huéspedes extranjeros con nacionales, en el primer cuadro de la ciudad es prematura aún la llegada masiva de paisanos, que en su mayoría arriban por carretera, tanto los grupos que viajan en autobuses turísticos como los que llegan por su cuenta, en ADO o vehículos propios.
Fuentes de la Asociación de Hoteles expresaron que el turismo que llega a los hoteles del centro es mayormente de nacionalidad mexicana, el cual arriba por carretera bien en vehículos propios o en autobuses turísticos, mientras que una minoría llega a través del Aeropuerto Internacional de Cancún.
Las fuentes expresaron que casi todos los hoteles del primer cuadro tienen sistema de reservaciones vía Internet, tanto en páginas especializadas en centros de hospedaje de Cancún como a través de sitios propios, aunque reconocieron que estos últimos son minoría.
Respecto a las reservaciones, en su mayoría son de grupos que arribarán a Cancún en autobús turístico, como parte de una excursión y el promedio de estancia oscila entre los tres y los cinco días.
La actividad comercial registró un pequeño repunte en comparación con los últimos días, aunque representantes del sector consideran que será a partir del 21 ó 22 de diciembre cuando se observe un mayor incremento en las ventas de productos de todo tipo, especialmente recuerdos, perfumes, artículos de piel y relojes, que suelen ser los más demandados entre los turistas.
De hecho, servidores turísticos de Punta Cancún señalaron que ya se nota una mayor demanda de restaurantes, bares y establecimientos comerciales en general, aunque todos esperan un fuerte repunte en la afluencia de visitantes, especialmente nacionales, que acudan a nuestro destino aprovechando el período vacacional de invierno.
No obstante, consideran que podría irles mucho mejor si no hubiera tantos hoteles que trabajasen con el sistema del todo incluido, mismo que hace mucho daño a todos los sectores enfocados a la venta de productos y servicios a nuestros turistas.
Y es que la mayor parte de los centros de hospedaje que operan en todo incluido literalmente incluyen en su oferta todo lo que los visitantes puedan desear, desde bufetes y comidas a la carta en sus restaurantes hasta discotecas, pasando por farmacias, abarrotes, souvenirs, artesanías típicas mexicanas, tours náuticos en todas sus modalidades y viajes a destinos cercanos o no tanto que merece la pena conocerse, en especial parques y ruinas arqueológicas.